Afirman que la característica principal de las empresas estatales en los últimos años ha sido la corrupción y el uso de recursos de todos los bolivianos para sustentar el funcionamiento de entidades deficitarias. Ven necesidad de que el nuevo Parlamento investigue a fondo la forma en que varias empresas estatales fueron administradas en los últimos años. Esta semana, la estatal de aviación, presentó una denuncia por la retención ilegal de cerca de $us 18 millones en la compra de pasajes de vuelo desde 2023 hasta esta gestión.
Fuente: El Diario
Tras destaparse un nuevo escándalo de corrupción que compromete a la estatal Boliviana de Aviación (BoA), el diputado por Comunidad Ciudadana (CC), Alejandro Reyes Careaga, afirmó que una de las primeras tareas de la nueva Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) será llevar delante una auditoría a la totalidad de las empresas estatales, con la finalidad de establecer responsabilidades y recuperar recursos.
En criterio del asambleísta paceño, la característica principal de las empresas estatales en los últimos años ha sido la corrupción, a esto se suma el uso de recursos de todos los bolivianos para sustentar el funcionamiento de entidades deficitarias desde su creación.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
“Realmente BoA, al igual que todas las empresas públicas, no solamente son deficitarias, son la invitación a la corrupción y debe haber una investigación en ese sentido”, expresó.
Según el parlamentario opositor, es preciso que el nuevo Parlamento investigue a fondo la forma en que varias empresas estatales fueron administradas en los últimos años, así como establecer la cantidad de recursos que fueron invertidos en implementarlas y mantenerlas, tomando en cuenta que operaron en números rojos y fueron un botín del poder para beneficiar con fuentes de empleo a su militancia y aliados.
“Estoy convencido de que la próxima Asamblea Legislativa Plurinacional debe iniciar una auditoría de todas las empresas públicas de la mano de la Contraloría General del Estado y del próximo Gobierno”, dijo Reyes.
En ese marco, adelantó que ninguna exautoridad o persona involucrada en actos de corrupción que involucren a empresas estatales, quedará en la impunidad y se priorizarán procesos para sancionar conductas irregulares y recuperar recursos defraudados al Estado boliviano.
“No se van a salvar de los posibles delitos que hoy se están denunciando, en ese sentido procuramos que las investigaciones empiecen ahora, sin embargo, se le dará continuidad en el próximo Parlamento”, finalizó.
Esta semana, la estatal Boliviana de Aviación, presentó una denuncia ante el Ministerio Público por la retención ilegal de cerca de $us 18 millones en la compra de pasajes de vuelo desde 2023 hasta esta gestión por la empresa Kitex Experience, informó el gerente de la empresa Mario Borda.
El hecho fue revelado tras una auditoría realizada por el ingeniero Luis Murillo, después de reportarse la existencia de una “pasarela de pagos que retenía fondos”.
De acuerdo con los hallazgos de la auditoría realizada, BoA firmó en 2017 un contrato con Kitex Experience para la ejecución de las pasarelas de pago de la compra de pasajes.
Si bien la empresa aseguró que tenía el reconocimiento de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) para estas operaciones, no era así, porque además el ente regulador dispone que en caso de instituciones públicas las transferencias de dinero se deben efectuar en un plazo de 72 horas y no de 15 días como lo hacía la firma, según el contrato.
“La empresa Kitex Experience actúa como agregador, cuando es facilitador de pagos directamente”, explicó Murillo al enfatizar que un facilitador “tiene que enviar el dinero hacia la cuenta del comerciante, en este caso Boliviana de Aviación”, de inmediato.
“Ellos (la empresa) están haciendo ahí la retención total del dinero y no porcentual, como establece la ley, porque obviamente las pasarelas tienen un porcentaje que tienen que generar y que dan en sus actividades. Pasado el lapso de 15 días, ese dinero recién ingresa a las cuentas de BoA, entonces es ahí donde se ha hallado el primer mecanismo de manejo y manipulación, posible enriquecimiento ilícito que está pasando acá”, señaló Murillo.
A ello se suma que la empresa aseguró que contaba con una infraestructura antifraude, lo que no era real, dejando expuesta a BoA a “ciberataques” y daños “aún más grandes”.
En tanto, Mario Borda definió los hallazgos como “graves irregularidades” afectando, incluso, la página web institucional.
Fuente: El Diario