El dólar paralelo sigue bajando ante señales de cambio económico en Bolivia


La cotización informal cayó a Bs 11,35 por dólar en un clima de expectativa por la llegada de Rodrigo Paz a la Presidencia. Los contactos con organismos internacionales y la promesa de un giro en el modelo económico fortalecen la confianza del mercado.

Por Ernesto Estremadoiro Flores



Fuente: eldeber.com.bo

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El tipo de cambio paralelo del dólar en Bolivia continúa descendiendo y este martes se cotizó en Bs 11,35 para la compra y Bs 11,28 para la venta, según diferentes portales digitales. La tendencia, que se mantiene desde hace varias semanas, refleja una mejora en las expectativas económicas y políticas ante el inminente cambio de gobierno.

La elección de Rodrigo Paz como nuevo presidente marcó un punto de inflexión. El también economista y exsenador ha mostrado una postura más abierta hacia la cooperación internacional y la estabilidad macroeconómica.

 Recientemente realizo un viaja a Estados Unidos y Panamá. En estos países, mantuvo reuniones con representantes del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la CAF – Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, con el objetivo de asegurar liquidez y respaldo financiero para el país.

Uno de los anuncios más relevantes fue el acuerdo de una línea de crédito por más de 3.000 millones de dólares con la CAF, destinada a estabilizar la economía boliviana, garantizar la importación de combustibles y fortalecer las reservas internacionales.

Analistas coinciden en que estos acercamientos enviaron una señal positiva al mercado paralelo, que hasta hace poco reflejaba la desconfianza acumulada tras meses de escasez de divisas y una política cambiaria rígida.

Con este panorama, el tipo de cambio paralelo se aleja de los picos de más de Bs 19 registrados a mitad de año, aunque aún persiste una amplia brecha con la cotización oficial de Bs 6.96. El reto del próximo gobierno será sostener esta tendencia sin generar presiones inflacionarias ni comprometer la estabilidad fiscal.

Mientras tanto, el mercado observa con cautela los primeros pasos del gobierno electo y espera señales concretas sobre cómo se ejecutará el prometido plan de estabilización y apertura económica.