El asistente técnico Gabriel Ramírez confirmó que el cuerpo técnico de Óscar Villegas evalúa establecer su centro de operaciones en la capital oriental para preparar el repechaje rumbo al Mundial 2026, que se disputará en México a finales de marzo.
Fuente: diez.bo
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La selección boliviana comienza a definir su hoja de ruta hacia el repechaje mundialista y todo apunta a que Santa Cruz será la sede elegida para concentrar al plantel. Así lo confirmó Gabriel Ramírez, asistente técnico de Óscar Villegas, en una conversación con DIEZ, donde adelantó que la decisión prácticamente está tomada.
Ramírez detalló que este martes se llevará a cabo una reunión clave del cuerpo técnico para ultimar detalles de la planificación. “Es muy probable que hagamos base en Santa Cruz”, anticipó el colaborador de la Verde, remarcando que el plan logístico está en su fase final y solo resta su confirmación oficial.
La decisión obedecería a cuestiones operativas, climáticas y de conectividad aérea, considerando que Bolivia afrontará un repechaje exigente en México. La Verde quedó ubicada en la llave B y deberá enfrentar en semifinales a Surinam, el viernes 26 de marzo a las 19:00 (hora boliviana). Si logra avanzar, disputará la final ante Irak el martes 31 del mismo mes, desde las 21:00.
El desafío es mayúsculo: para clasificar al Mundial 2026, Bolivia debe ganar ambos partidos. El cuerpo técnico busca optimizar todos los aspectos posibles, desde la preparación física hasta la logística de viajes, con el fin de llegar a tierras mexicanas en las mejores condiciones competitivas.
Antes de cerrar el año, la selección todavía tiene una última prueba. En diciembre, la Verde disputará un amistoso en condición de visitante frente a un combinado peruano, programado para el domingo 21. Ese encuentro permitirá realizar las últimas observaciones individuales antes de que inicie la planificación más intensa.
“La planificación que estamos realizando se basa a partir del 2026”, sostuvo Ramírez, dejando en claro que el proceso tiene una mirada más amplia que el repechaje, con énfasis en consolidar un equipo joven, competitivo y preparado para sostener un ciclo completo.
La Federación Boliviana de Fútbol espera oficializar en los próximos días la confirmación de Santa Cruz como sede base, un movimiento que podría marcar el inicio de una nueva etapa en la preparación internacional del seleccionado nacional.