Velatorio del ‘Bigotón’ será abierto al público este sábado


El exseleccionador de Bolivia falleció a los 72 años. Sus restos serán velados y enterrados en Santa Cruz, como él lo pidió.

Martin Suarez Vargas

 



Fuente: Red Uno

El exdirector técnico de la selección boliviana, Xabier Azkargorta, falleció el viernes a los 72 años, generando profunda conmoción en el fútbol nacional. Este sábado, sus restos serán velados en Santa Cruz, ciudad donde pidió permanecer tras su muerte.

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Azkargorta fue el principal artífice de la histórica clasificación de Bolivia al Mundial de Estados Unidos 1994, la única conseguida en cancha, y es ampliamente recordado por su vínculo afectivo con el país.

Su última voluntad: descansar en Bolivia

Xavier Pedraza, hijastro del entrenador, informó que se está cumpliendo el deseo del técnico: ser enterrado en Santa Cruz, ciudad que consideraba su segundo hogar por el cariño de la gente y los logros deportivos vividos con la selección.

“Estaba muy feliz con el pueblo boliviano y con todo lo que representa la selección en estos últimos días que ha estado en lo alto”, señaló Pedraza.

Velorio y entierro

El velorio comenzó el viernes por la noche para familiares y allegados. Este sábado desde las 17:30, el espacio se abrirá al público para que hinchas, colegas y ciudadanos puedan despedirlo.

El entierro se realizará en el Cementerio de las Misiones de Santa Cruz, cumpliendo su última voluntad.

Salud delicada y legado deportivo

El técnico vasco sufría de una enfermedad congénita del corazón y complicaciones pulmonares.

A pesar de su delicado estado de salud, se mantuvo atento a la actualidad futbolística nacional y al desempeño reciente de la Verde.

Azkargorta deja un legado imborrable como símbolo de uno de los momentos más importantes del fútbol boliviano. Su figura es recordada no solo por su logro deportivo, sino por su identificación con el país que eligió como hogar.

 

Finalmente, Pedraza confirmó que Azkargorta será enterrado en el Cementerio de las Misiones de Santa Cruz, cumpliendo así su última voluntad y dejando un legado imborrable en la historia del fútbol boliviano.