El comandante General de la Policía describe cómo recibió la institución y cuenta planes más próximos. Asegura que llegó hasta la cabeza de la Policía Boliviana por mérito propio.
Fuente: eldeber.com.bo
El comandante General de la Policía Boliviana, Mirko Sokol, advirtió que «ciudadanos que estén ofreciendo dinero y policías que estén recibiendo, ambos van a ser aprehendidos». Así lo reveló en una entrevista realizada con Sissi Áñez’.
La autoridad policial reveló su trayectoria profesional, las dificultades que enfrentó y cómo llegó hasta el cargo máximo de la institución verde olivo. Aseguró que conoció al vicepresidente del Estado, Edmand Lara, después de que fue posesionado en el cargo de comandante.
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Su carrera
«Durante toda mi carrera he trabajado en unidades en las cuales se orienta el trabajo precisamente a la lucha contra las irregularidades, contra la corrupción, he sido fiscal policial, he sido investigador de la dirección de asuntos internos, en algún momento cuando era teniente», disparó Sokol.
Según su mismo relato, ocupó el cargo de jefe del Departamento Nacional de Transparencia y Lucha contra la Corrupción. Desde allí denunció públicamente irregularidades en el ingreso a las unidades académicas de la Policía; en este caso, «algunas autoridades superiores, entre generales, coroneles y nivel subalterno, alrededor de 20 personas fueron procesadas penal y disciplinariamente, algunos de ellos ingresaron a la cárcel», aseveró.
También fue vicerrector de la Universidad Policial, desde donde denunció a autoridades educativas, por lo cual alrededor de unos 40 funcionarios policiales fueron enviados a procesos disciplinarios. Y por último, pasó por el Comando Departamental de Chuquisaca, «donde adopté las medidas ya con más autonomía y pude, como comandante departamental, cortar cualquier situación de corrupción».
El mismo comandante aseguró que llegó hasta la cabeza de la Policía Boliviana por mérito propio.
¿Cómo encontró la Policía?
De acuerdo con Sokol, algunos malos servidores públicos policiales que llegaron a la institución han generado tanto normativa como ciertas estructuras adecuadas, «acomodadas para cometer algunas irregularidades y hechos de corrupción. Para favorecer los hechos de corrupción, precisamente».
Entonces, el comandante sostuvo que lo primero que se debe hacer es reestructurar, tanto normativa como organizacionalmente la Policía Boliviana, «para que de esta manera las medidas que estamos tomando no sean, como muchas personas piensan, momentáneas, sino que se sienten las bases para que la policía de aquí en adelante ya no vuelva, no la policía, algunos malos policías, no vuelvan a cometer estos hechos irregulares».
La normativa necesita cambios
A decir del titular de la Policía, primero se debe trabajar en la ley orgánica, que data de hace más de 40 años, «tiene que ser modernizada y actualizada. No ha sido modificada, precisamente, porque existen algunos elementos dentro de nuestra ley que pueden generar, de alguna manera, focos de corrupción», apuntó.
Agregó que la ley 101, que «también ha sido mal orientada y ha sido manejada, de manera que se ha generado también corrupción, tanto a la gente que puede transgredir la norma, como también en el ámbito exterior, porque hemos tenido algunos malos abogados, por ejemplo, que se han valido de la ley 101 para generar hechos irregulares».
Los destinos es un tema aparte
Otra de las normativas que el comandante sugiere cambiar es «la ley de plan de carrera, porque el tema de los destinos ha sido otro de los focos de corrupción, ya que en muchas ocasiones algunas autoridades han generado cobros de dinero por cambios de destino, lo cual no puede ocurrir».
Para Sokol, el destino tiene que estar en función a la capacidad, antigüedad, especialidad, méritos que tenga cada servidor público policial.
El uniformado indicó que se pretende que cada servidor público policial tenga establecido durante toda su carrera, en función al grado, qué cargos debe ocupar. «Esto lo vamos a hacer a través también de la modernización y sistematización de la Policía Boliviana, ya he instruido de que se pueda establecer un sistema en el manejo de personal, a través del cual sean las bases de datos las que puedan extraer la información de cada uno de los servidores públicos policiales y se le asigne las opciones de destino que le corresponden».
Sokol manifestó que «ya no puede ser que una sola persona pueda definir el destino de 40 mil en función a intereses personales, en algunos casos, a intereses económicos, en otros casos, o simplemente por el mal o buen humor con el que haya despertado».
Pero ahora el compromiso es pleno, afirmó Sokol, «para cualquier servidor público policial y cualquier ciudadano que denuncie hechos de corrupción, que se le va a dar todo el apoyo y la cobertura necesaria para que no pueda haber ningún tipo de represalias contra ellos».
Es más, sostuvo que todos los policías conocen todos los mecanismos y anunció que la Dirección de Investigación Policial Interna va a cambiar su esencia, «va a salir a las calles, va a recibir denuncias, van a ir a verificar hechos de corrupción, inspectoría a través de los departamentos de transparencia también lo van a hacer, pero hay un elemento fundamental que tiene que conocer la población y la institución, los camaradas, que también a través de inteligencia se va a realizar un seguimiento y una investigación a todos los lugares más neurálgicos donde se genera corrupción».
Inclusive remarcó que «si identificamos a través de inteligencia a gente que está cometiendo corrupción, ciudadanos que están ofreciendo dinero y policías que están recibiendo, ambos van a ser aprendidos y van a ser remitidos a la instancia penal correspondiente».


