El Ministro de Economía atribuyó la crisis a exautoridades y cuestionó que critiquen la eliminación del subsidio a los combustibles.
Evo Morales y Luis Arce, cuando en 2020 fue presentada la candidatura del MAS. Foto: Evo Morales
El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Gabriel Espinoza, respondió a las críticas formuladas por los expresidentes Evo Morales y Luis Arce contra el Decreto Supremo 5503, norma que elimina la subvención a los combustibles y establece un paquete de ajuste económico.
“Hay algunos responsables de la crisis económica y política que hoy, en vez de estar dando opiniones, deberían llamarse al silencio, y si no quieren hacerlo, deberían explicar por qué nos han dejado un país como el que nos han dejado”, afirmó Espinoza, al referirse a las exautoridades que cuestionan las medidas adoptadas por el actual Gobierno.
Tanto Morales como Arce, quienes ocuparon la Presidencia por casi 20 años bajo el Movimiento Al Socialismo (MAS), cuestionaron las medidas de la administración de Rodrigo Paz Pereira, pues consideran que afectará a los sectores más vulnerables y provocará el incremento generalizado de los costos de los productos de la canasta familiar.
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Decreto
Al respecto, el ministro Espinoza sostuvo que quienes hoy critican el decreto tienen “muy poco que comentar”, al considerar que la actual situación económica es consecuencia directa de su gestión.
“Es su responsabilidad, es su culpa junto con la de su ministro de Economía (Arce) y toda la banda de ladrones que han administrado este país durante 20 años, situación que ahora nosotros estamos empezando a solucionar”, agregó.
Morales y Arce fueron de los primeros líderes políticos en rechazar públicamente la eliminación del subsidio a los combustibles, medida que ha generado protestas y movilizaciones de distintos sectores, especialmente del transporte y organizaciones sociales.
Desde el Gobierno, Espinoza reiteró que el Decreto Supremo 5503 busca enfrentar una crisis estructural, ordenar las finanzas públicas y sentar las bases para la recuperación económica, pese a las resistencias políticas y sociales que ha despertado la norma.