En opinión del experto en hidrocarburos ya era “imposible” seguir manteniendo la subvención, por lo que la administración de Paz no tenía otra “alternativa inmediata” frente a la crisis económica y al desabastecimiento de carburantes, heredado del anterior Gobierno.
Fuente: ANF / La Paz
El experto en hidrocarburos Francesco Zaratti señaló que el gobierno de Rodrigo Paz no tenía otra alternativa que asumir esta medida económica: eliminar parcialmente la subvención. Cree que ahora el Gobierno tiene que “inundar” de diésel el mercado interno para mostrar que su medida funciona.
Explicó que el “déficit fiscal era insostenible”, sumado a la falta de reservas internacionales, de dólares para comprar los combustibles importados, un 90% de diésel y un 55% de gasolina. “Mantener el suministro era cada vez más oneroso para el Tesoro General del Estado y para el Ministerio de Economía”, dijo.
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En opinión de Zaratti se trata de un “retiro parcial de la subvención” porque está en proporción a la importación. Cómo importamos más diésel, el precio del diésel resulta a 9,80 bolivianos”. ¿Por qué es más caro? Simple, porque gastamos más para importar diésel”.
Añadió que ya era “imposible” seguir manteniendo la subvención, por lo que la administración de Paz no tenía otra “alternativa inmediata” frente a la crisis económica y al desabastecimiento de carburantes, no obstante advirtió que las medidas conllevan riesgos porque con los nuevos precios se tiene que garantizar el suministro de carburantes.
“Ahora tienen que inundar de diésel el mercado para mostrar que la medida funciona”, espera que el gobierno haya realizado los cálculos para garantizar el suministro, porque lo otro no sería muy responsable que hayan lanzado un medida sin tener la posibilidad de abastecer el mercado interno.
Cree que “tienen un colchón de dólares para normalizar el diésel, cosa que no habían logrado hacerlo; las filas del diésel seguían largas”, sostuvo Zaratti en declaraciones a la ANF, tras la decisión del Gobierno de eliminar la subvención a los carburantes.
También señala que con el nuevo precio del diésel a Bs 9,80, la gente ya no va a querer tener su tanque lleno porque “resultará muy caro”. Por otra parte, el experto sostiene que la medida les puede dar más holgura para la importación. No obstante “al final, la medida alivia el déficit fiscal, pero no da los dólares”, precisó.
Por otra parte, dijo que la medida apunta a “desanimar” al contrabando porque no tiene sentido seguir en ese ilícito con el precio internacional, además sabiendo que el mayor contrabando no era el hormiga en bidones, sino aquel se realizaba en cisternas que compraban en los puertos, se desviaba en el camino y no entraba al país.
Añadió que las medidas relacionadas a los combustibles también -curiosamente- impactaron en las criptos y bitcoin tendencia que empezó a subir y que hasta la noche de este miércoles llegó a Bs 10,50.
“Lo que parece prever que con estos bolivianos -más que va a captar- el gobierno va a comprar dólares en el mercado. Entonces el dólar puede encarecerse. Eso es, digamos, la apuesta especulativa que están haciendo con el dólar”.
Zaratti también precisó que a decir del ministro de Hidrocarburos, Mauricio Medinaceli, los precios se “van a congelar” por seis meses, es decir que posteriormente se ajustarán al nuevo tipo de cambio .
“Digamos, durante 6 meses va a estar congelados. Sí. Después no van a estar congelados. Significa que dependiendo del comportamiento de la moneda del tipo de cambio, entonces pueden variar. Entonces, si el tipo de cambio es 9, 10, 11, habrá un precio de 9, 10 u 11 (bolivianos) de la gasolina”.