Oriente Petrolero visita este miércoles a Real Tomayapo con dos bajas clave en su plantel. El equipo de “Copito” Andrada busca mantener el envión anímico tras vencer a Blooming y acercarse a zona de clasificación internacional, mientras que los tarijeños afrontan una final anticipada en casa.
Fuente: diez.bo
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Oriente Petrolero afronta una visita determinante a Real Tomayapo este miércoles (18:00) en el estadio IV Centenario de Tarija, por la fecha 27 del torneo todos contra todos. El cuadro albiverde llega con buen ánimo tras su última victoria, pero también con sensibles ausencias que obligarán al cuerpo técnico a mover fichas.
Las lesiones de Dieguito Rodríguez y Mateo Abastoflor, sufridas durante el clásico cruceño del domingo, dejaron al equipo con dos bajas importantes. Ambos jugadores se habían consolidado en la titularidad y formaban parte de la estructura base de “Copito” Andrada. Ninguno fue incluido en la delegación que viajó el martes por la tarde rumbo a Tarija, donde pasaron la noche.
El entrenador deberá realizar ajustes para conformar un equipo competitivo. Manuel Bonilla se perfila como el reemplazante natural de Rodríguez, mientras que Kevin Salvatierra aparece como la principal alternativa para cubrir la ausencia de Abastoflor en la zona de creación. También vuelven a la convocatoria el arquero Jorge Araúz y el defensor Pablo Vaca, quienes estaban fuera del equipo en los últimos compromisos.
Pese a los contratiempos, Oriente viajó motivado. El 3-1 sobre Blooming permitió al plantel recuperar confianza en un tramo decisivo del campeonato. “Estamos mentalizados en hacer buenos partidos. Queremos traer los tres puntos y jugar este encuentro como una final”, afirmó Fernando Nava antes del viaje, reflejando el compromiso del grupo.
La tabla obliga a los cruceños a ganar. Oriente marcha décimo con 33 puntos, a seis de la zona de clasificación a torneos internacionales, por lo que no tiene margen para dejar escapar unidades. Cada partido se juega como una final y la visita a Tarija no será la excepción.
Real Tomayapo tampoco quiere quedar rezagado. El cuadro chapaco es undécimo con 29 unidades y se juega sus últimas cartas para seguir con vida en la lucha por un premio internacional. En el IV Centenario, ante su gente, intentará hacerse fuerte en un duelo que promete alta intensidad y mucha tensión.