Guabirá venció 1-0 a Blooming en Montero y aseguró su clasificación a la Copa Sudamericana 2026. Tras el partido, Marcelo Straccia destacó el esfuerzo del plantel, el crecimiento del equipo desde su llegada y el valor de devolver al club a un torneo internacional.
Fuente: diez.bo
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Guabirá cumplió su objetivo y volvió al plano internacional. Con el triunfo por la mínima diferencia ante Blooming, el Azucarero se quedó con uno de los cupos a la Copa Sudamericana 2026, un logro que fue celebrado con emoción por su director técnico, Marcelo Straccia, quien remarcó el trabajo realizado desde agosto y el mérito de sus jugadores.
“Creo que lo merecimos antes. Fuimos superiores al rival, tuvimos cinco o seis situaciones de gol”, afirmó el entrenador, destacando el dominio de su equipo más allá de que el gol recién llegó en la recta final del encuentro. Para Straccia, el resultado fue la consecuencia de un proceso que tuvo como principal motor devolverle una alegría a la hinchada.
El DT recordó el difícil momento en el que asumió el mando del equipo y valoró el crecimiento mostrado a lo largo del torneo. “Hemos llegado a mediados de agosto cuando el equipo tenía 13 puntos y hoy nos vamos con 43. Con deudas pendientes, porque no logramos de visitante el porcentaje que hubiéramos querido, pero felices por el objetivo cumplido”, sostuvo.
Straccia también puso énfasis en la importancia de que Santa Cruz vuelva a tener otro representante en torneos internacionales. “Que la ciudad tenga otro equipo siempre le da nivel al fútbol. Esto es para la institución y para toda la gente de Montero”, señaló, visiblemente emocionado, y agradeció el respaldo recibido desde su llegada.
El entrenador no ocultó su deseo de darle continuidad al proyecto y pensar en lo que viene. “Ahora voy a descansar y ojalá la comisión directiva me permita seguir armando un equipo competitivo, que represente a la ciudad y pelee arriba. Esto no es un final, es un comienzo”, remarcó.
Finalmente, Straccia tuvo palabras de gratitud para quienes confiaron en él y para sus dirigidos. “Le agradezco a Dios esta oportunidad, no me equivoqué en venir. Y a estos monstruos que corrieron y se mataron todos los partidos. Haber devuelto al club al lugar que se merece es lo más importante”, concluyó el DT de Guabirá.