El presidente Evo Morales admitió ayer por primera vez que hay descontrol en la producción de coca y que parte de ésta es desviada al narcotráfico. Asignó a las seis federaciones la tarea de evitar el desvío de la coca al narcotráfico.
El presidente Evo Morales participa en la inauguración del Congreso de Productores de Coca de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba, en Lauca Ñ, ayer. – Noé Portugal Los Tiempos
Por July Rojas M. – Los Tiempos – 17/10/2010
Evo exige controlar el cultivo y venta de coca
El mandatario asignó a las seis federaciones la tarea de evitar el desvío de la coca al narcotráfico
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Lauca Ñ |El presidente Evo Morales admitió ayer por primera vez que hay descontrol en la producción de coca en el trópico de Cochabamba, que una parte de ésta es desviada al narcotráfico y conminó a los dirigentes cocaleros a tomar decisiones para poner un alto a esa situación que –dijo– desprestigia el proceso de cambio que lidera.
El mandatario participó este sábado en la inauguración del Congreso de Productores de Coca de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba en Lauca Ñ, donde además indicó que existe división entre los cocaleros. “Compañeros, ustedes saben que una parte de nuestra coca es desviada al problema ilegal.
Si toda nuestra coca tuviera mercado legal, ¿por qué vamos a estar hablando de cato? No hay por qué estar hablando de cato, libre cultivo, más cultivo… Pero desvían”, dijo Morales y señaló que existen personas que dividen sus chacos en complicidad con algunos dirigentes para tener más de un cato de coca que termina desviada al mercado ilegal.
Denunció también la existencia de más sindicatos y que algunos dirigentes identificados dividen las tierras para que exista más producción de coca.
Las decisiones que los cocaleros deben tomar en el congreso, que concluye hoy, estarían relacionadas con la aplicación de sanciones drásticas para las personas que no respeten el cato de coca por chaco.
“Algunos dirigentes no están respetando el cato de coca. (…) Hay que debatir el cato de coca. En una hectárea de cato de coca, en dos hectáreas es lo que tenemos que debatir y definir ahora”, dijo el Presidente visiblemente molesto y recordó que en el trópico sólo deben existir 7 mil hectáreas de cultivos de coca.
Morales, que es el máximo líder de las seis federaciones del trópico, aseguró: “Tengo información de algunos mercados primarios. Creo que ni una carga llega al mercado central y eso está en la conciencia de ustedes”.
El Presidente no estará en la clausura de la reunión, pero dijo que esperará atentamente los resultados de la misma.
Sanciones
En tanto, el viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, quien también participa en el congreso en Lauca Ñ, indicó que las seis federaciones deben determinar las sanciones para las personas que no cumplan con el cato de coca por chaco.
Dijo que del total de productores de coca en el trópico sólo un “25 a 30 por ciento son inorgánicos, que están llevando (el cultivo de coca) a los parques nacionales o incrementan el cato de coca. Tiene que haber acá un planeamiento sincero, sano y creo que una de las resoluciones debe ser eso: el respeto al cato de coca”.
Programas productivos son “diferentes”
El presidente Evo Morales dijo que es obligación del Gobierno implementar programas productivos pero diferentes a los promovidos en los últimos 10 y 20 años por la Embajada de Estados Unidos en el marco del desarrollo alternativo. Reiteró que esos proyectos fueron un “engaño” pues en la actualidad ningún emprendimiento que buscaba reemplazar el cultivo de coca se mantiene.
Señaló que en cuatro años de su gestión existen funcionando varias plantas productivas en el trópico. Dijo que hay una fábrica de palmito en la zona de Carrasco, que aún no funciona por falta de agua y gas, pero destacó la planta productora de leche y la planta procesadora de cítricos en Villa Tunari.
El jefe de Estado, que habló durante más de dos horas en la inauguración del congreso de productores de coca, hizo un repaso detallado de las conquistas del movimiento cocalero que lo llevaron al Gobierno en 2006.
En su intervención recordó toda la trayectoria organizativa y de lucha de las seis federaciones cocaleras en la región del trópico y pidió a los cocaleros no olvidar ese proceso e incurrir en faltas respecto al respeto al cato de coca.
Pidió mayor unidad a los campesinos para no dar argumentos a Estados Unidos sobre el crecimiento del narcotráfico.
REGLAMENTO Y LEY DE LA COCA
Tras la inauguración del congreso de los productores de coca, los dirigentes conformaron comisiones en las que debatirán hasta hoy sobre la comercialización e industrialización de la hoja, reglamentación, control social y evaluación.
Respecto a la reglamentación de la comercialización de coca, que en la última semana causó movilizaciones por parte de los cocaleros de los Yungas de La Paz, el titular de la Dirección de Control e Industrialización de la Coca (Dicoin), Luis Cutipa, dijo que es necesario un ajuste al documento porque es evidente que existe un desvío de la hoja de coca al narcotráfico “empezando del mercado de Adepcoca y terminando en los mercados primarios del trópico de Cochabamba. Por eso hemos hecho un ajuste al reglamento para que el narcotráfico sea controlado desde la zona de producción”.
Respecto a la elaboración del proyecto de la Ley de la Coca, que reemplazaría a la Ley 1008, Cutipa señaló que saldrá después de que se conozcan los resultados del estudio del consumo de la coca a cargo del Instituto de Estadística..
EVO ADMITE QUE HAY COCA QUE VA AL NARCOTRÁFICO
Chapare. Morales les dice a los cocaleros que con ello pueden ‘desprestigiar’ al Gobierno
La Razón
El presidente Evo Morales aceptó ayer que los sindicatos de productores de coca del Chapare desvían parte de su producción al narcotráfico y aumentan sus cultivos de la hoja al margen de los acuerdos. En la inauguración de un congreso de cocaleros en la zona del trópico cochabambino, Morales regañó a sus bases porque, a su juicio, con su actitud pueden “desprestigiar” a su Gobierno y las reformas que encabeza.
“Compañeros: ustedes saben que una parte de nuestra coca desvían al problema ilegal. Si toda nuestra coca tuviera mercado legal, para qué vamos a estar hablando de un cato” (parcela controlada), dijo. “Tengo información de algunos mercados primarios, creo que ni una carga llega al mercado central y eso está en la conciencia de ustedes”, interpeló.
El “cato de coca” es igual a 1.600 metros cuadrados cultivados con la planta, que puede poseer cada familia campesina en el Chapare.
También criticó Morales que para aumentar su producción, los cocaleros han llegado a inscribir a niños como propietarios de las parcelas, para darles su propio cocal. Recordó que el 2004 lograron que el entonces presidente Carlos Mesa aceptara la siembra de 3.200 hectáreas en el Chapare, superficie que subió a 7.000 al subir él al poder el 2006.
Morales insistió en que en esa zona del país no pueden haber más parcelas de coca que las existentes actualmente, ni más sindicatos, porque no se pueden superar las siete mil hectáreas permitidas. “Cómo es posible, hermanas y hermanos, que en una hectárea de coca también debe haber cato, y vamos a pelearnos para desprestigiar este proceso, al Presidente, y los gringos justifiquen. El año pasado ¿qué han dicho en su informe? Las altas autoridades del gobierno fomentan el narcotráfico”.
La agencia EFE recuerda que el gobernante quiere modificar la ley antidroga para que a las 12.000 hectáreas legales que hay en los Yungas, que van al llamado “consumo cultural”, se sumen las siete mil del Chapare y otras mil en otros lugares para llegar a un total de 20.000.
Los sindicatos de cocaleros de los Yungas, que tienen otro liderazgo, mantienen un bloqueo de vías hace seis días para pedir que Morales elimine definitivamente una resolución que pretendía establecer un control del comercio de la hoja en la zona.
Según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), el 2009 las plantaciones de coca en Bolivia llegaron a 30.900 de hectáreas, 1% más que el 2008. Ese dato contrasta con otro de Estados Unidos que habla de un crecimiento del 10%, hasta 35.000 hectáreas.
Cifras de Naciones Unidas
El 2009 se contabilizó en Bolivia 30.900 hectáreas de cultivos de coca, que representaron 54.628 toneladas cosechadas. De ese total, 19.467 pasaron por el mercado legal, mientras que el resto, 35.161, no pasó por el control del Gobierno, reveló un informe de Naciones Unidas en junio.