Ministerio de Gobierno anuncia que erradicará tortura en acciones policiales


Inminente baja para policías presuntamente involucrados en deceso de empresario Edwin Quispe Pacheco tras ser detenido en la madrugada del viernes.

   El ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, anunció el miércoles que erradicará la tortura en las acciones policiales y la violación de los derechos humanos, a cualquier costo.

    "Nosotros vamos a erradicar a cualquier costo la tortura de las acciones policiales. Las señales que se dan desde el Gobierno son absolutamente claras, que no dejan dudas, sobre la consigna de la lucha en contra de la impunidad y la responsabilidad de los servidores públicos", aseguró en conferencia de prensa.



    Llorenti aseguró que las denuncias de la muerte de Juan Edwin Quispe Pacheco (35), que supuestamente fue golpeado por efectivos de la Policía luego de ser detenido el pasado viernes y la tortura que sufrió un adolescente en octubre de 2009 en Cochabamba, "no quedarán impunes".

    Ratificó que en el Gobierno "no se aceptan torturas porque no se hablan de delitos comunes sino crímenes de lesa humanidad, cuyo autores tienen que ser puestos a disposición del Ministerio Público para que sean procesados".

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    Aseguró que el Ministerio de Gobierno inició acciones judiciales y que se querellará contra los malos funcionarios policiales que vulneren los derechos humanos y practiquen la tortura, que está tipificado como un delito de lesa humanidad.

    El Ministro de Gobierno insistió que esos casos no son faltas simples, ni una infracción cualquiera, sino "se trata de la comisión de una violación considerada como un crimen en contra de la humanidad".

    En el caso de la tortura del adolescente, ratificó que ordenó la suspensión de tres policías y ordenó que sean puestos a disposición de la Fiscalía de Distrito de la ciudad de Cochabamba.

    "Estos policías serán sometidos a un proceso penal por tortura, donde el ministerio de Gobierno es parte, porque se querelló contra estos malos funcionarios que desprestigian a la Policía Boliviana", afirmó.  La Paz, 20 oct (ABI).

Inminente baja para policías presuntamente involucrados en deceso de empresario

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Familiares de Edwin Quispe Pacheco, quien falleció la madrugada del sábado tras ser detenido y presuntamente golpeado por policías. (Foto: Daniel Espinoza/ABI)

    La Paz, 20 oct (ABI).- El director Departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC-LP), Rosalío Álvarez, anunció el miércoles la inminente baja de los policías presuntamente involucrados en el deceso de Edwin Quispe Pacheco (35) tras ser detenido en la madrugada del viernes (02.00 horas).

    "La baja de la institución es un hecho para que estos malos funcionarios policiales que, más allá de cometer un delito, desprestigian la imagen institucional, por lo que serán remitidos a la justicia una vez que sean identificados", advirtió Alvarez.

    El jefe policial aseveró que convocará a los policías que realizan patrullaje diurno y nocturno por esa zona y dependen de los módulos de la plaza Alonso de Mendoza, San Francisco, calle Figueroa y calles Ingavi-Pichincha.

    Aseguró que "este caso no quedará en la impunidad". Dijo que la FELCC está en procura de identificar a los policías que intervinieron en una pelea entre Edwin Quispe y otras personas en la calle Figueroa, donde consumían comida, en el sector conocido como "Los agachaditos".

    "Con la descripción que hizo la compañera del fallecido, en las próximas horas se identificará a los policías que intervinieron en el hecho", aseguró Álvarez.

    "Los policías somos servidores, protectores de la vida de las personas y no se puede atentar contra la seguridad de nadie. Los que actúan contra esos principios no son policías", indicó.

    Según el médico forense, Edwin Quispe, administrador de la empresa de eventos Arco Iris, falleció a consecuencia de un traumatismo encéfalo craneal.

    La madre de la víctima, Dolores Pacheco de Quispe, acompañada de su hija mayor, Mercedes, solicitó al Defensor del Pueblo, Rolando Villena, y al Ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, que intervengan en este caso para encontrar a los autores.

    Andrea Tapia, compañera de Quispe, manifestó que él era un empresario joven que nunca hizo daño para que lo maten a golpes.

    "Si lo golpearon deberían auxiliarle, se les pasó la mano, pero hay un vehículo de servicio público, cuyo conductor debe cooperar y revelar a los investigadores lo sucedido", señaló.

    Según su relato, junto a Quispe se retiraban el viernes de un acontecimiento social y fueron a la calle Figueroa a comer algo, cuando se produjo un altercado con tres personas que dejaron el lugar profiriendo insultos.

    Dijo que ello provocó la reacción del empresario que protagonizó una pelea. Señaló que posteriormente retornó al lugar cuando fue abordado por algunos sujetos, dos policías y un civil que se identificó como teniente, los que procedieron a agredirlo.

    "Inclusive utilizaron un artefacto eléctrico denominado "torito" para hacerle pasar corriente en el abdomen, además de rociarlo con gas", agregó.

    Tapia acotó que "después de la golpiza introdujeron a Edwin Quispe en un vehículo de servicio público, supuestamente para llevarlo a las oficinas de Conciliación Ciudadana de la calle Pando, donde nunca llegaron".

    Dijo que cuando se apersonó a esas oficinas policiales fue informada por un suboficial de apellido Bustillos que le informó que Quispe no fue llevado a esas dependencias.

    Relató que cuando salió de esa unidad policial encontró a Quispe aún con vida en el suelo en la cuadra que existe entre la estación de servicio Volcán y la Plaza Alexander.

    "Su boca estaba llena de gas, le apliqué respiración boca a boca. Luego fue auxiliado por dos cabos y conducido en la ambulancia de Bomberos al Hospital de Clínicas, donde falleció", afirmó.