El Bunker 08/05/2018Para muchos superar una violación puede resultar difícil hasta imposible y más si producto de ello hay un embarazo no deseado, lo más probable es que se recurra a lo más fácil y rápido por así decirlo como el aborto, pero no es el caso de Sandra (nombre ficticio) una adolescente que fue violada por su propio padre y quedó embarazada, pero tuvo valentía y le dijo no al Aborto.El Bunker, programa radial conducido por Agustín Zambrana, conversó con Sandra quien compartió un poco de su historia y lo feliz que se siente al haber tomado la decisión de tener a su hijo, que la próxima semana cumplirá dos años. “Cuando estaba embarazada no pensé abortar, me dijeron que querían que aborte, pero yo no quise, no acepte”.“Yo no sabía nada del embarazo ni del aborto porque era niña, mi tía me dijo que aborte, pero yo ya tenía cuatro meses, el doctor dijo que podía ser un riesgo para mí y para mi hijo. Hoy me siento feliz al ver a mi hijo a mi lado”, contó.Quien jugó un rol fundamental en la recuperación de Sandra fue la Hrna. Selma María de Acosta, directora del Centro de Formación Madres Adolescentes “Madre María”, quienes brindan apoyo profesional a las madres adolescentes. “Acogemos a la mamá y al niño que ha sufrido abuso, violación o quedó embarazada, estamos ahí para preservar la vida”.“Nosotros acogemos, asistimos, educamos y luchamos para que el día de mañana puedan ser personas capaces de salir adelante. Nuestra casa tiene la posibilidad de acoger 15 mamás y 15 niños”, señaló.Según la directora del centro es difícil para una víctima de abuso sexual salir adelante, pero no imposible, para ello trabajan con psicólogas que ayudan a levantar la autoestima de las adolescentes y que estas vean el mundo con otros ojos. “En la casa les enseñamos que el mundo no termina ahí, que la vida sigue, que el hijo no es un estorbo. Ellas llegan con la cabeza baja, pero con el apoyo de los profesionales se levantan con la cabeza erguida”.“Proyecto Esperanza”Proyecto Esperanza trabaja realizando acompañamiento y sanación a personas que han sufrido un aborto. El acompañamiento consta de nueve pasos; La mujer antes del embarazo; el embarazo; la decisión de abortar; el aborto; etapas del acoplamiento, eliminar el enojo y dolor; reconciliación con Dios, con ella misma y los demás; el encuentro con él bebe y dotar de herramientas para que la persona pueda sobrellevar una posible recaída.“Nosotros no encargamos de brindar un acompañamiento pastoral a todas las personas que han sufrido un aborto, provocado o accidental”, explicó Patricia Castro, quien forma parte del proyecto.Por su parte, Ronald Solares que también forma parte del proyecto aclaró que el acompañamiento es absolutamente confidencial, nadie se entera de lo que la persona les cuenta. “Tenemos la bendición de Dios de acompañar, conocer experiencias y sobre todo ayudar a quienes lo necesitan.Para mayor información comunicarse al 75551176, podrás recibir asesoramiento de profesionales expertos en el tema que te ayudarán a salir adelante después de una experiencia tan difícil como un aborto.Foto: hiveminer.com