De un curul a los municipios: las polleras en la arena política boliviana

Remedios Loza llegó al Legislativo a fines de los 80 y en los 90, las reformas legales impulsaron la incursión de más mujeres de pollera a este ámbito. De un curul a los municipios: las polleras en la arena políticaLegisladoras de pollera, durante una sesión del Legislativo. Foto: Freddy Barragán / Página Siete Remedios Loza es una pionera. En 1989 ganó una diputación por La Paz y se convirtió en la primera mujer de pollera que alcanzó un curul en el Legislativo. Loza llegó a ese espacio político  de la mano de Conciencia de Patria (Condepa), el partido que lideró el extinto Carlos Palenque.“Remedios es una mujer emblemática que además llega a ser diputada entre las primeras de lista de Condepa y ahí se ve cómo desde lo que fue su programa televisivo, que tenían Carlos Palenque con la comadre Remedios, a ella también  la posicionó muy fuerte en sectores sociales, lo  que después se tradujo en un apoyo y respaldo electoral”,  afirma Tania Sánchez, directora ejecutiva del Centro Gregoria Apaza.Pero debieron pasar varios años hasta que haya otro “hito”, esta vez en el ámbito municipal.  Un punto clave es la denominada “Ley de cuotas”, una reforma que  entró en vigencia en 1997 y obligó a los partidos a incluir en sus listas  un 30%  de postulantes mujeres. La normativa se aplicó por primera vez en las elecciones municipales de 1999.“No hay una fecha exacta, pero a partir del 30% de la Ley de cuotas, se aperturó el ingreso de las mujeres, obligatorio en municipios, y entonces empezaron a entrar las mujeres de pollera a cargos, a espacios políticos”, afirma la investigadora Gloria Velásquez, responsable del equipo de investigación que publicó Participación política de las mujeres en los concejos municipales rurales, libro que patrocinó el PIEB en 2002.“Los movimientos femeninos y feministas lograron la promulgación de la denominada ‘Ley de cuotas’, que obligó a los partidos políticos a incluir en sus listas de candidatos a congresales y concejales a un 30% de mujeres, que se reflejó en un aumento considerable de la participación femenina en las elecciones municipales de 1999”, reza una de las conclusiones del estudio.Sánchez explica que las reformas que hubo a fines de la década de  los años  90, respecto a la participación y descentralización, incidieron en la mayor presencia de la mujer de pollera en la política.Remedios Loza   ingresó en la política a fines de la década de los años 80. Foto: Sara Aliaga / Página Siete“Después todo el proceso que se ha desarrollado entre fines de los 90 y principios del 2000, con la ley de participación popular, las reformas que ha  habido en lo que  hace al proceso de descentralización municipal, le da muchísima más visibilidad a mujeres de a pie y entre ellas  muy fuerte a mujeres de pollera, que son las que viven en el territorio  y que han peleado también desde su participación, su pertenencia a organizaciones territoriales y prioritariamente también a organizaciones sectoriales;  y en el proceso ya de la Asamblea Constituyente ya se las ve con mayor fuerza…”,  afirma  Sánchez.La primera experienciaLuego del conjunto de reformas legales referidas, que impulsó la participación política de las mujeres, en las elecciones municipales de 1999 fueron electas 248 mujeres, quienes fueron elegidas concejalas “en forma directa”, según el  estudio citado.Velásquez afirma que entonces no realizaron la identificación de quiénes eran mujeres de pollera, pero subraya que debieron ser un “buen número”.La investigadora indica que entre los hallazgos del estudio se encontró que  las mujeres no se profesionalizaban en el poder. “No se dedican el 100% a la política,  dividen su tiempo en sus jornadas;  son madres, trabajan y la política es una cosa más que hacen. Entonces,  la dedicación de la mujer no es exclusiva”, manifestó.Así con esas particularidades nació la primera experiencia a la que se le atribuye haber  posibilitado un aumento “substancial” en la presencia de mujeres en la política.“A nivel global, con la aplicación de la “Ley de cuotas” (1997), la participación política de las mujeres se incrementó substancialmente en todos los municipios del país tras las  elecciones municipales de 1999, con lo cual se destaca la importancia de esta medida de acción positiva, como un mecanismo para impulsar la representación política de las mujeres”, es otra de las conclusiones del libro citado.Evo y otro impulsoCon la llegada del presidente Evo Morales al poder en 2006 también se genera otro proceso en el que las mujeres de pollera llegan a ganar  protagonismo. Hay entrevistadas que citan, como ejemplo,  el caso de Silvia Lazarte, quien llegó a ocupar la presidencia  de la Asamblea Constituyente.En 2010 se aprobó la Ley 026 del Régimen Electoral, la cual en su  Artículo 58 establece que “las listas de candidatas y candidatos a diputadas y diputados Plurinominales, titulares y suplentes, serán elaboradas con equivalencia de género”.No hay unanimidad sobre dar  todo el crédito al  partido de Gobierno como factor de gran incidencia para  la  incursión de mujeres de pollera en la política.“Hay que ser realistas, que desde que nuestro hermano Presidente asumió han cambiado las leyes y desde entonces han empezado a cambiar, a valorar los derechos y los deberes también de la mujer. Todos teníamos que identificarnos  y también las puertas se han abierto en la universidad, en las escuelas básicas, en todo. Entonces, eso  hizo que también nuevamente valoremos nuestra identidad”, afirma Lourdes Quispe, presidenta de la  Asociación de Concejalas de La Paz.Pero también hay otras posturas al  respecto.  “No creo que sea solamente un aporte de un partido político, sino  la lucha  que desde los distintos movimientos de mujeres  fueron reivindicando su forma de vestir… Más allá de la influencia de un partido político en específico, es la influencia también del paquete de reformas estructurales que se han hecho en el país y una demanda de los distintos sectores de organizaciones sociales y ahí creo que es innegable no reconocer el movimiento de mujeres en Bolivia, que siempre ha estado exigiendo la no discriminación y fortalecer la participación política de las mujeres”, expresa Sánchez.Hoy por hoyLas cosas han cambiado desde 1989, aunque entre las protagonistas indican se deben dar más pasos para avanzar.    Lourdes Quispe afirma: “Falta  un poco de asesoramiento jurídico, es  lo  que un poco siempre nos falta… a veces asesoramiento técnico, porque no todas  somos profesionales, pero las dificultades son el asesoramiento técnico y jurídico;  pero también estamos en camino para fortalecer más que todo eso, el asesoramiento técnico y jurídico para todas las hermanas”.Quispe marca el antes y el después sobre lo que vivieron quienes visten pollera y actúan en la política.  “Antes hasta se avergonzaban por el apellido, por la misma pollera; ahora    están identificadas y valoradas también”.En una  entrevista, Remedios Loza contó que cuando llegó por primera vez a Legislativo sintió cómo entre sus colegas había la sensación de que entraba una persona que no tendría incidencia.“En ese momento pensaban que estaba entrando una mujer de pollera sin ton ni son. Pero yo ya venía de un trabajo no político, sino de un trabajo social comunicacional”, afirmó  quien fue la pionera de esta historia.Página Siete  / Pablo Peralta M.  / Periodista