Kalina de Bulgaria, la princesa que enfrenta los rumores por su apariencia


Tras años de especulaciones que hablaban de un abuso de las cirugías estéticas, el marido de la hija de Simeón II aclaró el difícil momento que pasó su esposa.

Kalina está casada desde 2002 con el explorador español Antonio «Kitín» Muñoz. El Mercurio

emol.com / Ángela Tapia F.

SANTIAGO.- «Me parece muy doloroso que se frivolice con algo que para mí fue un trauma», dijo Kalina, la princesa búlgara de la que muchos dijeron que había abusado tanto de las cirugías estéticas, que su rostro había cambiado por completo.
Pertenece a una familia nómade. Casada desde 2002 con el explorador español Antonio «Kitín» Muñoz, constantemente viaja de un lado a otro junto a su hijo, Simeón Hassan Muñoz, aunque tiene como centro hogareño Marruecos.De visita el mes pasado en España, las fotos publicadas en los medios de comunicación volvieron a reabrir rumores acerca de su apariencia, e incluso se debatió el tipo de operaciones que se habría hecho en la cara, acompañado de varias burlas en redes sociales por su nariz, según indica ABC.



La pesadilla de Kalina

Cansado de las especulaciones, Muñoz quiso salir en defensa de su esposa y reveló un duro momento vivido por la hija de Simeón de Bulgaria, que casi le cuesta la nariz y la visión de un ojo.»Cuando tenía ocho años, en el colegio se partió las dos paletas de los dientes. En el 1999, estudiando arte en Londres, fue a un dentista para ponerse fundas con la mala suerte de que el dentista perforó demasiado la base del hueso. Esto le causó serios problemas, una infección y una nueva intervención», explicó el explorador a Hola.»Durante mi expedición en el año 2000 (…) estando en mi campamento recién llegada de Londres, se le reprodujo la infección. Nadie le dio importancia, pues al principio parecía un pequeño problema. Un marinero le dijo que se enjuagara cada día con agua de mar, mezclada con agua dulce, y así lo hizo», agregó.Crédito: Captura Hola.Muñoz indicó que pasaron los siguientes días en alta mar, y la infección de Kalina se agravó. «Tuvimos que evacuarla de urgencia y fue operada, también de urgencia, dando prioridad a limpiar la infección y causando daños de tipo estético, que no tenían importancia en ese momento pues lo vital era salvar el ojo y la nariz de la infección«.»(Estamos) cansados de ver cómo se frivoliza con un tema tan serio de salud», dijo.Kalina, por su parte, conversó en la misma entrevista que Muñoz, explicando lo doloroso que era para ella que se dijeran mentiras de algo que le pudo «costar la vida» o dejar ciega.»Tengo el umbral del dolor altísimo y nadie imagina lo mal que lo pasé. Esos momentos no se lo deseo a nadie», comentó según ABC. «Superé el cambio de mi físico porque siempre tuve claro que lo importante era salvar mi vida y mi vista«, agregó.

Simeón de Bulgaria, el «rey ciudadano»

Imagen de archivo de 2005, año que perdió las elecciones. Crédito, AP.
Kalina es hija de Simeón II, quien a los 6 años accedió al trono de Bulgaria, alcanzando a ocupar la corona apenas tres años, hasta que un referéndum dio fin a la monarquía de su país, obligándolo a él y a su familia a vivir en el exilio.De vuelta a Bulgaria definitivamente el año 2001, Simeón fijó su residencia en el palacio de Vrana junto a su familia, compuesta por la aristócrata española Margarita Gómez-Acebo y los cinco hijos que tuvo con ella: Kardam, Kyril, Kubrat, Konstantin-Assen y Kalina.Ese mismo año fue nombrado Primer Ministro de Bulgaria, tras ganar las elecciones parlamentarias con su partido Movimiento Nacional Simeón II, pero perdió las siguientes, en 2005.Siempre ha dicho que no quiere restablecer la monarquía en el país y se hace llamar el «rey ciudadano». Precisamente fueron solamente reyes sin trono -de Grecia, Rumania, Serbia y Albania- a los que el 16 de junio de 2017 invitó a su palacio para celebrar sus 80 años.

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