Si bien el sector inmobiliario en Bolivia está desarrollándose más apresuradamente y tiene un futuro prometedor, la compra y venta de propiedades rurales (que también está viviendo un gran dinamismo) sigue siendo más compleja que las de los inmuebles urbanos o terrenos para vivienda. Sin embargo, complicado no quiere decir imposible. Hoy compartimos algunas recomendaciones sobre la comercialización de tierras productivas basadas en consejos de Francisco Oña Coelho, Director de la inmobiliaria rural Oña Coelho, para que sepas de primera mano cómo elegir o hacer atractiva para la venta una propiedad rural.
Los 4 pasos a seguir para comprar una propiedad rural
- Asesorarnos con inmobiliarias: Nadie sabe más de los pros y contras de determinada vivienda que un agente inmobiliario con experiencia. Esta persona nos ayuda a transitar por el mercado agrícola y las zonas con potencial y, además de facilitarnos muchísimo los análisis de los aspectos técnicos y legales, nos acompaña en la negociación hacia una compra exitosa.
- Análisis legal:Este es uno de los análisis que el agente inmobiliario puede hacer por nosotros junto a un abogado agrarista. Es crucial realizar un análisis legal antes de visitar cualquier terreno para ahorrar tiempo y dinero.
- Análisis técnico:Debemos saber especialmente si la propiedad se encuentra dentro del PLUS (Plan de Uso de Suelo), pues esto nos permite saber si el terreno se encuentra libre de áreas con algún tipo de restricción y qué actividad se puede realizar en él. En este caso, el profesional ideal para esta tarea es un ingeniero forestal.
- Usar herramientas tecnológicas: Actualmente, hay imágenes satelitales disponibles con las que podemos observar densidad boscosa, altimetría, áreas de anegamiento y varias opciones más que complementen la información necesaria para tomar la decisión correcta
Los 4 indispensables para vender una propiedad rural
- Mantenerla cuidada: La mejor manera de mostrarle al comprador la capacidad de renta y producción de una propiedad es, precisamente, mostrarla en plena producción. De esta forma generaremos una imagen mucho más atractiva y prometedora.
- Documentos legales al día: Los documentos infaltables que legitiman toda propiedad rural son el título de propiedad emitido por el Instituto Nacional de Reforma Agropecuaria (INRA), la inscripción en derechos reales e impuestos pagos y el plano catastral (INRA). Una carpeta con estos archivos le garantizará al potencial comprador un determinado nivel de seriedad y orden en el que se encuentra la propiedad.
- No sobreexponer la propiedad: A veces, para tener más alcance, recurrimos a enviar ofertas de propiedades a grupos de Whatsapp o medios no tan rigurosos o confiables. En este sentido, es importante contactarse con un agente inmobiliario experimentado que provenga de una empresa legalmente constituida para evitar la desvalorización que puede sufrir nuestra propiedad al pasar por la boca (y celulares) de todos.
- Sobreprecio: El interés personal del intermediario y del vendedor suelen enfrentarse, por eso esta práctica de venta le da al primero la decisión de la venta o no de su propiedad. Según la inmobiliaria rural Oña Coelho, lo mejor es dejar que la negociación sea flexible y transparente, y acordar un porcentaje sobre el monto de venta.