Es el único hijo que Nicolás Maduro tuvo con su primera mujer. Está casado, tiene dos hijas y ostenta todo tipo de cargos en el polémico gobierno de su padre.
Si se diera el supuesto negado de mancillar el suelo patrio los fusiles llegarían a Nueva York señor Trump, y tomaríamos la Casa Blanca”. Micro en mano, señalando con su dedo a cámara y totalmente exaltado Nicolás Maduro Guerra (Caracas, 1990) respondía así a las amenazas de Donald Trump, que el día anterior había dicho que no descartaba una opción militar contra Venezuela. Era el 12 de agosto de 2017 y Nicolasito, como se conoce al hijo de Nicolás Maduro, arengaba así a los “funcionarios” congregados en la Asamblea Nacional Constituyente que interrumpían con aplausos un discurso tan vacío de propuestas como lleno de tópicos.
Las críticas en las redes no se hicieron esperar: “Otro burro perdido, que cree que la Casa Blanca se encuentra en new York y no en WASHINGTON” / Burro !!!! Mientras tú te pones más gordo, miles de niño, jóvenes y adultos mueren todos los días. Quítense la mascara señores para salvar el país./ ¡LADRÓN!, ESCÚCHATE A TI MISMO Y DEDÍCATE A APRENDER, INFORMARTE. ¡MENTIROSO Y CLON DE M….! IGNORANTE
No era la primera vez que las redes ardían contra Nicolasito. Dos años antes, en marzo de 2015, el hijo del presidente acudía a la boda de José Zalt, un hombre de negocios sirio-venezolano propietario de la marca de ropa Wintex. Allí, en el lujoso Gran Hotel Meliá, grabaron al joven bailando a ritmo de música árabe mientras le caía una lluvia de billetes de dólar por encima. En un país donde las divisas extranjeras han estado 15 años prohibidas, la gente se indignó.
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Según Informe 21, la primera esposa de Maduro se llama Adriana Guerra Angulo y se casaron en la caraqueña parroquia de El Valle en 1988. De ella se habla poco en la prensa local y, según ABC, es empleada de la Asamblea Nacional.
Hijo del primer matrimonio de Nicolás Maduro con Adriana Guerra Angulo, Nicolás, fue un chico con inquietudes artísticas – ha realizado cursos de música en la Universidad de las Artes y toca la flauta–. Según El venezolano news, Maduro Guerra nunca fue el mejor de su clase. Según un documento del Consejo Nacional de Universidades, tenía una media de 12,5 sobre 20. Aunque ha estudiado económicas en la Universidad Nacional de las Fuerzas Armadas (UNEFA) no tiene un título que certifique que se ha graduado.
Desde pequeño trabajó junto a su padre en el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Cuando Maduro se convirtió en presidente en 2013, Nicolasito ocupó su primer puesto en el gobierno venezolano como Jefe del Cuerpo de Inspectores Especiales de la Presidencia de la República, un cargo creado especialmente para él y cuya finalidad era vigilar que los empresarios no especulen con los precios. La designación de cargos no acabó ahí. En 2014 lo nombró Coordinador de la Escuela Nacional de Cine de Venezuela para dar alas a las inquietudes artísticas de su hijo. Los cineastas se volvieron locos, indignados por tener que pedir la aprobación del joven para sus proyectos, contaba ABC. «El hijo de Maduro no sabe nada del Séptimo Arte. De lo que sí sabe es de robar cámara», acotó el dramaturgo José Tomás Angola. «El colmo del desprecio y del cinismo», exclamó Héctor Manrique, director de teatro del Grupo Actoral80.
En abril de 2017 anunció su candidatura a la Asamblea Nacional Constituyente –un órgano creado con el fin de redactar una nueva constitución–. Tras salir elegido, fue el lugar donde Nicolasito pronunció su famosa frase contra las amenazas de Trump.
En paralelo a su actividad política, Maduro Guerra ha tenido tiempo para formar una familia y hacer abuelo a su padre. Con solo 24 años se casó con Gryssel Torres, con quien tiene dos hijas, una de once años y otra de cuatro. Por su parte, el presidente Nicolás Maduroestá hoy casado con Cilia Flores, una de las mujeres más poderosas y temidas de Venezuela. Sibilina e influyente, siempre ha estado en la sombra, rodeada de una amplia red de colaboradores que ella misma se ha tejido y que le permiten controlar hasta el último resquicio de la política venezolana.
La pareja no tiene hijos en común, aunque Cilia tiene tres vástagos de un matrimonio anterior. Al de Nicolás Maduro ya lo conocemos. Tras ser elegido delegado del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Nicolasito manifestó con grandilocuencia que con él, el partido iba a “salvar a la humanidad”. Veremos qué cargos ostenta en la nueva legislatura de su padre y cuál es su capacidad para tan hercúlea tarea.
Fuente: revistavanityfair.es