El ‘cuento de hadas’ que vivía Guabirá jugando en casa (llevaba 15 partidos sin perder) se acabó. El nuevo Blooming, dirigido por Fernando ‘Teté’ Quiroz, y con Carlos Ortiz como puntal, superó (3-0) a Guabirá en la ‘Caldera’ y demostró que quiere ser protagonista en el torneo Adecuación. La academia se plantó bien y definió con claridad las opciones que generó. A Guabirá le faltó contundencia, no supo aprovechar las licencias que le cedió su rival y acabó con la impotencia de un equipo con voluntad, pero que careció de argumentos claros. Hubo abucheo general para el atacante Leandro Martínez, que perdió frente a Sergio Galarza, y después bronca por el ingreso de Sebastián Pol, que no es del agrado del hincha rojo, aunque al menos corrió. La primera parte el juego se tornó recio y por momentos bastante cortado. El sello de Quiroz en la academia se notó primero con el orden en defensa, muy pocas veces subieron los laterales Jorge Ortiz y Ricardo Verduguez y le dejaron al pie fino de Diego Valdés y al de Alejandro Gómez las habilitaciones para Hernán Boyero y Óscar Díaz. Limberg Gutiérrez, que volvió a jugar tras casi nueve meses, hizo la simple, recibió y tocó, y cuando hubo un tiro libre buscó el arco. Los azucareros solo atinaron a las corridas por derecha de Adrián Cuéllar (el mejor del local) y alguna sorpresa de Ovejero, que se mostró poco. Sin lucir demasiado, la academia se puso en ventaja a los 26’ a través de un cabezazo de Carlos Ortiz, que se zafó de la marca de Martínez. El público comenzó a incomodarse y a reclamar a Gatty Ribeiro, que sorpresivamente no estuvo de entrada A los 40’, el mismo Carlos Ortiz por poco y marca un golazo desde la mitad de la cancha. Vio adelantado a Viera, remató largo y el travesaño devolvió la pelota. Guabirá reaccionó a los 45’, pero Martínez perdió un mano a mano frente a Galarza. Su derechazo fue devuelto por un ‘Mono’ que se mostró sólido. En el complemento y obligado por las circunstancias, Claudio Marrupe envió a Ribeiro a la cancha y el pandino de entrada hizo de las suyas. Penetró bastante por derecha y en dos ocasiones cedió el balón a Pachi y a Martínez, pero estos la desperdiciaron. A los 57’ Cuéllar pudo empatar, pero Galarza evitó el gol. Con Guabirá partido, tras la salida de Camacho, Chávez inició un contragolpe, se sacó a Doyle Vaca y cedió el balón a Óscar Díaz, que puso el 2-0, a los 61’. El gol mató al rojo que después acabó rendido tras un remate de Jorge Ortiz que Díaz solo lo desvió (83’). El triunfo (3-0) devolvió la sonrisa a Blooming, que toma aire.
Fuente: Unitel.
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