Diego Ayo, vocero de CC, detecta que la relación Estado-medios entró en una nueva fase (de ataque). Édgar Montaño, diputado del MAS, dice que el Gobierno “no quiere acallar a ningún tipo de medio”.Sitios y páginas en redes difunden información destinada a atacar a medios y periodistas que son independientes y críticos al Gobierno. La Asociación Nacional de la Prensa (ANP) detecta que la aparición de esos espacios y la difusión de ese tipo de publicaciones “anuncian el inicio de una campaña orientada a desacreditar”.La oposición detecta que la relación Estado-medios ingresó a una nueva fase, en la que desde el oficialismo se busca atacar a la prensa. El MAS, en cambio, afirma que también fue víctima de ese tipo de sitios, pero que como en Bolivia rige la libertad de expresión, el Ejecutivo no puede “acallar” a ningún medio.Un recuento realizado por este medio da cuenta que entre los portales que difunden publicaciones contra la prensa están Primera Línea, La Resistencia y LMPO, página de Facebook. Un común denominador es que en esos espacios no se identifica a sus gestores o dueños.Sobre el primero, Chequea Bolivia, iniciativa que detecta noticias falsas, concluyó: “El portal Primera Línea Noticias difunde contenido engañoso, porque sus informaciones se redactan sobre algunos datos reales pero, aparentemente en forma intencional, descontextualizados y manipulados”.El sitio web se describe como “un periódico digital”, que difunde “noticias que buscan informar, formar y entretener”.En el caso de La Resistencia, desde octubre de 2018 difundió al menos ocho artículos contra Página Siete. En el más reciente, publicado el 19 de junio, se lee que este medio “no es solamente enemigo del Estado, sino también del pueblo” y que “está destinado a la manipulación de la información y falsedad de hechos relacionados con el actual Gobierno”.El portal se identifica como una “plataforma web”, cuyo “único objetivo” es “divulgar artículos de opinión y de análisis político, social y económico desde un punto de vista crítico, plural y progresista”.
En el caso de LMPO, que opera en Facebook, difundió el post “Conozca el dueño de la página web de Página Siete”. Tanto Chequea Bolivia como Bolivia Verifica -un medio digital que también se dedica a la verificación de noticias falsas- analizaron la publicación y concluyeron que ésta falta a la verdad.En la descripción de esa página se lee: “La verdad sin tildes o comas, siempre será mal hablada para quienes mienten y se burlan de la ingenuidad de sus lectores”.Franz Chávez, director ejecutivo de la ANP, afirmó que este tipo de publicaciones “anuncian” una campaña orientada a desprestigiar a la prensa.“La difusión de noticias falsas, manipuladas y con una intencionalidad explícita en nuevos portales web anuncian el inicio de una campaña orientada a desacreditar a periodistas, defensores de libertades ciudadanas, medios y organizaciones independientes como parte de una estrategia política coincidente con la etapa previa a las elecciones generales”, sostuvo Chávez.El ejecutivo agregó: “Es reprochable el intento de confundir a las audiencias con mensajes sin sustento, con datos falsos y noticias que se presentan como verdades, y más aún, sin responsable identificado para evitar las responsabilidades de la legislación vigente”.Diego Ayo, vocero nacional de Comunidad Ciudadana (CC), manifestó que la relación Estado y medios pasó a una nueva fase. En ese marco, explicó que las tres etapas precedentes por las que atravesó ese relacionamiento son: 1) Apropiación mediática. 2) Montaje normativo y 3) “Fase Fiscal”, publicidad a afines y asfixia a medios críticos.“Sobre ese constructo, estamos viendo una cuarta fase: de ataque, de amedrentamiento, de insultos, de injurias y claro el Gobierno tiene un montón de guerreros digitales y ese tipo de periódicos con publicidad gubernamental”, explicó Ayo.El vocero de CC manifestó: “Estamos frente a un Gobierno autoritario y una oposición a la cabeza de Carlos Mesa que quiere recuperar la democracia”.Desde el MAS, el diputado Édgar Montaño reconoció que hay ese tipo de sitios, pero afirmó que lo que queda es “aclarar” y, en otros casos, “aguantar”, puesto que en el país rige el derecho a la libertad de expresión.“Siempre hubo eso. Hay otra página que dice ‘qué mierdanga’, que es una palabra que uno no puede pronunciar, pero hay así redes sociales o páginas en las que supuestamente informan, y lo que hacen más bien es desinformar”, afirmó.El legislador agregó: “El tema es que desde que está vigente la Ley de Imprenta, la libre expresión, la democracia no se puede regular nada. Lo único que hay que hacer es aclarar esas mentiras; en otros casos, soportar y aguantar. Ahora bien, el Gobierno absolutamente no quiere acallar a ningún tipo de medio”.Ayo pronosticó que tras la cuarta fase, viene una etapa “más dura”. “Yo creo que después vamos a entrar a una quinta fase, que es la judicial, juicios contra periodistas”.La vocería nacional de CCDiego Ayo, vocero nacional de Comunidad Ciudadana (CC), sostuvo que en los últimos días en el caso de ese frente político se difundieron informaciones sobre la vocería que no corresponden a la realidad.Se hablaba en las redes de que José Manuel Ormachea fue apartado de la vocería de esa alianza política. Ayo negó tal versión y manifestó que Ormachea, como Paola Cortez, “siguen siendo voceros departamentales” de CC, y, además, subrayó que “no hay ningún desplazamiento de nada”.El fenómeno
- Portales El fenómeno detectado es que se crearon portales en los que se ataca a los medios y periodistas críticos al Gobierno.
- Postura La ANP detecta que la aparición de esos espacios y la difusión de ese tipo de publicaciones “anuncian el inicio de una campaña orientada a desacreditar”.
- Masismo En el MAS indican que el partido en función de Gobierno también fue víctima de ese tipo de portales. Agregan, además, que como en el país está en vigencia la libertad de expresión, el Ejecutivo no puede “acallar” a medios.
Fuente: https://www.paginasiete.bo