Agrega que la presencia de la princesa de Japón tiene que ver con la celebración de los 120 años de la inmigración japonesa.
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Okinawa I se apresta a cumplir 65 años; sin embargo, las primeras migraciones japonesas a Bolivia datan de 1899, cuando 91 nipones se trasladaron desde Perú, donde habían llegado ante la necesidad de mano de obra, a Bolivia para dedicarse a la extracción de caucho, y algunos nunca más volvieron a su país, de acuerdo con información precisada por EFE.La princesa llega a Bolivia tras cumplir con una visita protocolar a Perú, donde también celebró la llegada de los primeros japoneses al vecino país.EL DEBERTe puede interesar:Okinawa I, un pedazo del sol naciente en el corazón de Suramérica