Lo que se ve y se anota




Cuando estuvo en Santa Cruz, el periodista de la CNN, Fernando del Rincón dijo que en Bolivia le había ocurrido lo más extraño de su carrera, pues nunca había sido objeto de tantos premios, gratificaciones y halagos. Por lo general un reportero recibe el rechazo de los poderosos por cumplir con su misión de decir la verdad y en el caso de nuestro país, la gente le reconoció por haberse puesto del lado de la democracia y en contra de la dictadura, cuya hegemonía comunicacional ha sido muy difícil de romper. De no haber sido por figuras como Del Rincón, Andrés Oppenheimer y otros periodistas de semejante talla, no se hubiera podido derrotar el relato del “golpe de Estado” que intensamente repetían los cómplices del cocalero prófugo. Esos guerreros de la información no están acostumbrados a las medallitas y solo se conforman con las noticias fidedignas. Eso los obliga a decir y opinar sobre lo que ven y lo que están viendo y opinando en este momento no es para hacerles homenajes.

Fuente: eldia.com.bo