Campesinos de Huatajata tomaron la propiedad del ex vicepresidente; la saquearon, quemaron objetos e izaron la wiphala. Cárdenas responsabilizó al Gobierno; su esposa e hijo tienen heridas. Alcalde de los ponchos rojos instigó a la turba.
izq.) Esposa • Lidia Katari recibe atención médica en La Paz. der.) Hijo • Iru Cárdenas llegó con heridas en el rostro y cuerpo.
Gente afín a Evo ataca a la familia y la casa de ex vicepresidente Cárdenas
La Razón
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“¡Recuperado para el pueblo, carajo!”, se lee en la puerta de la casa del ex vicepresidente de la República Víctor Hugo Cárdenas, ubicada sobre la carretera hacia Tiquina. Una turba de gente afín al MAS tomó ayer con violencia esa propiedad, en castigo porque la ex autoridad hizo campaña por el No a la nueva Constitución Política del Estado.
Cárdenas responsabilizó a Evo Morales Ayma de lo sucedido. “Cualquier atentado que haya contra mi esposa y mis hijos lo hago responsable al Presidente y a todo su gobierno”, dijo y añadió: “No van a callar mi voz ni todas las voces de los que hemos trabajado por el No”.
La toma se produjo en la comunidad Sankajahuira, cantón Huatajata del municipio de Achacachi (Omasuyos, La Paz), a 96 km de la sede de gobierno.
Cerca del mediodía, unas 500 personas llegaron al lugar; un grupo ingresó a la vivienda pese a que la esposa de Cárdenas, sus tres hijos y dos familiares más se encontraban en el interior; sacaron colchones y otros objetos y los quemaron en el patio.
Luego de romper los vidrios, saquear las pertenencias, pintar las paredes con las leyendas “Del pueblo para el pueblo” y “Casa de la tercera edad”, además de izar la wiphala como señal de posesión y victoria, un ampliado de los dirigentes de los nueve cantones y lugareños se desarrolló en la puerta de la casa. Un equipo de sonido amplificó la participación de los oradores.
El ejecutivo de la Federación de Campesinos del sector Lago y Cordillera, Gonzalo Apaza, justificó a Erbol la acción asumida y dijo que fue obligado por los comunarios a tomar la casa.
Señaló que la gente se enfureció cuando escuchó que la esposa de la ex autoridad empezó a gritar y por eso procedieron al saqueo y a la quema de objetos.
Este medio comprobó que la policía sindical formó un cerco alrededor de la propiedad y no permitió el ingreso ni el trabajo de la Policía y los periodistas.
Cerca de las 13.30, Cárdenas denunció a los medios que “una turba aleccionada por el Gobierno ingresó a mi casa, destrozó todo. Estoy preocupado por la seguridad de mi familia, con la que he perdido contacto”.
Minutos antes, su esposa, Lidia Katari, en un contacto telefónico con PAT, informó entre sollozos que los comunarios encolerizados “rompieron puertas y nos sacaron a patadas, empujones y chicotazos. Mi hijo tiene una herida en el ojo”.
El viceministro de Régimen Interior, Marcos Farfán, señaló, en conferencia de prensa, que la Policía actuó, pero fue rebasada y tuvieron que reforzarla. “En este momento tenemos 55 policías”, dijo y agregó que la actitud de la gente era pasiva a las 19.00.
Al finalizar el ampliado, el ejecutivo del cantón Huatajata, Alfredo Huañapaco Quispe, declaró a los periodistas que “a pedido clamoroso se ha intervenido la casa de Cárdenas, (quien) nos ha hecho traición expresa, de manera dolosa y especiosa; se ha debido a los terratenientes y oligarcas del oriente, recibió una casa en Miami (EEUU)”.
Justificó la toma de la vivienda y dijo que Cárdenas habla “contra el pueblo campesino, contra el referéndum por el No; le dice no a los campesinos, indios, t’aras. Cárdenas abandonó su propiedad, sus tierras no cumplieron con la función social ni cumplió con los ancestros y por eso el pueblo ha decidido tomar su vivienda caballerosamente, sin violencia. La señora Lidia abandonó por su voluntad (la casa) y ella misma ha hecho la fogata y que no haga la calumnia”.
Huañapaco dijo que para consolidar la toma se declararon en estado de emergencia y advirtió que no acudirán a la justicia ordinaria sino a la comunitaria. Agregó que la vivienda fue recuperada para la tercera edad.
El alcalde de Achacachi, Eugenio Rojas, que participó del ampliado, dijo que “la gente ha justificado, ya estaba en la agenda tomar los predios; es la visión del pueblo, no es decisión de la autoridad municipal”. Reveló que la ex autoridad tiene tierras en el lugar y que “si insiste (con alusiones contra el Gobierno) dicen que pueden tomar eso más”.
La familia de Cárdenas llegó cerca de las 19.00 al hospital Arco Iris. “Mi esposa estuvo a punto de perder el conocimiento”, sostuvo.
La vivienda bajo resguardo campesino
Gobierno niega acusaciones
El viceministro de Régimen Interior, Marcos Farfán, negó que el Gobierno haya instigado los hechos de violencia protagonizados por comunarios en Huatajata y aseguró que instruyó a la Fiscalía el inicio de las investigaciones inmediatamente.
“Queremos dejar sentado que es completamente falso y una acusación temeraria, de parte del señor Víctor Hugo Cárdenas, que el Gobierno habría organizado estos actos de violencia”. Farfán aseguró luego que el caso ya está en manos del Ministerio Público.
“La situación que se ha presentado se ha puesto inmediatamente en manos del Ministerio Público. Me he comunicado alrededor de la 13.30 con el Fiscal de Distrito para que instruya a la Fiscalía de la región que inmediatamente tome cartas en el asunto e inicie la investigación”.
Señalan a los posibles instigadores
El ex vicepresidente Víctor Hugo Cárdenas sindicó a dos líderes campesinos de ser los responsables de la toma de su vivienda. Mientras que el Gobierno identificó al alcalde de Achacachi, Eugenio Rojas, entre las personas que estaban presentes en el lugar.
“Son dos líderes, Cruz Alarcón, de mi comunidad, y Alfredo Huayñapaco, de la comunidad vecina, activistas masistas conocidos. Son ellos quienes han conducido este atentado criminal”, dijo Cárdenas.
En el ampliado desarrollado ayer, Huayñapaco tomó la palabra y llamó “traidor” a la ex autoridad y admitió la toma.
Mientras que el viceministro de Régimen Interior, Marcos Farfán, señaló que “entre las personas que se ha identificado en el lugar se encuentra el alcalde Rojas de Achacachi, estos temas (su participación) tienen que ser investigados por el Ministerio Público”.
Turba toma la casa rural de ex “Vice” y agrede a sus familiares
La propiedad de Víctor Hugo Cárdenas fue atacada por comunarios de Omasuyos
Destrozos: así quedó el interior del inmueble del ex Vicepresidente
La Prensa
Los campesinos pretenden convertir el inmueble en un asilo para los ancianos del lugar.
Sank’ajawira y La Paz / La Prensa.- Campesinos de nueve comunidades ubicadas entre Huarina y Jank’oamaya, en la provincia Omasuyos de La Paz, tomaron ayer la casa de campo del ex vicepresidente Víctor Hugo Cárdenas y agredieron a sus ocupantes, pues pretenden convertir el inmueble en un asilo para los ancianos del lugar. El Gobierno pidió enjuiciar a los autores del asalto.
El viceministro de Régimen Interior, Marcos Farfán, informó ayer que alrededor de las 11.30, mientras se desarrollaba la feria semanal de Jank’oamaya, un grupo de comunarios, aparentemente ebrios, decidió marchar hacia la propiedad de la familia Cárdenas Catari, ubicada en la aldea de Sank’ajawira, en el municipio de Santiago de Huata.
Farfán hizo un llamado para que el Ministerio Público abra procesos contra los que resultaren responsables de este atentado a la propiedad privada ante la acusación de Cárdenas, en sentido de que el Gobierno había dado su visto bueno a esta toma violenta por su campaña contra el No a la Constitución Política.
Durante los días precedentes, una reunión ampliada de los lugareños había decidido tomar por la fuerza esa propiedad.
Julio Flores, portavoz de la organización política de Cárdenas, recordó que el ex Mandatario intentó el viernes dejar una carta al ministro de Gobierno, Alfredo Rada, pero el documento no fue recibido.
Sin embargo, ante una posible ocupación del inmueble de 300 metros cuadrados de superficie, efectivos de la Policía Fronteriza y de la Patrulla Caminera se encontraban cerca del lugar.
Farfán explicó que debido a la gran cantidad de personas que se concentraron en torno a la edificación, los efectivos “verde olivo” debieron pedir refuerzos y 55 hombres partieron del Distrito Policial 6, de El Alto.
Este contingente no pudo, empero, trasponer la carretera que une La Paz con Tiquina, debido a que la multitud le cerró el paso. La toma violenta se produjo cerca de las 11.30, cuando en el lugar se hallaban Lidia Catari de Cárdenas, dos de sus hijos y un sobrino.
Jenny Cárdenas, hija del dirigente político, declaró a la red Erbol que junto a sus familiares estuvieron a punto de asfixiarse, pues la turba prendió fuego a unos colchones de paja que se encontraban dispersos en la vivienda.
“Todo ha debido durar una hora. El humo de la paja nos llegó a intoxicar y cegarnos, mi hermano ahora se encuentra malherido, porque cuando cruzábamos la calle le alcanzó una pedrada. Hombres mayores me empezaron a golpear”.
El viceministro Farfán intentó desmentir esas denuncias: “Si hubiera alguna persona herida, inmediatamente daríamos a conocer el hecho”; no obstante, aseveró que el edificio quedó con las ventanas destrozadas.
La autoridad informó que los familiares de Cárdenas se encuentran en “un lugar seguro”, bajo custodia policial y que incluso fueron hospitalizados.
Algunas versiones responsabilizaron del hecho a Eugenio Rojas, alcalde de Achacachi y líder de los “ponchos rojos”, además de reconocido militante del Movimiento Al Socialismo (MAS), aunque Farfán calificó un “apresuramiento” intentar culpar a alguna persona del hecho, incluso antes de comenzar la investigación.
Sin embargo, aceptó que el hecho tiene motivaciones políticas, pero no partidarias, y que tras la llegada de los refuerzos policiales, el oficial a cargo persuadió a los lugareños de abandonar el inmueble asaltado.
Ese objetivo fue alcanzado parcialmente, pues los campesinos salieron del sitio, pero insisten en convertirlo en asilo y echar a la familia por haber rechazado la nueva Constitución.
Resolución del ampliado
“Nosotros no queremos a los k’aras, nosotros debemos manejarnos, eso es el cambio, es la transición y es por eso que hemos llegado a esto”. Un comunario se expresaba de esa manera durante el ampliado realizado en Sank’ajawira, después de la toma de la casa perteneciente a los Cárdenas Catari.
Agregó, en referencia al ex Vicepresidente, que es un kamaqe (zorro, ladino) “no nos puede manejar” y leyó la resolución del ampliado, que acusa a Víctor Hugo Cárdenas de ser cómplice de la entrega de los recursos naturales a las transnacionales y promover el No a la nueva Constitución en el referéndum del 25 de enero.
Por ello, decidieron tomar el inmueble para beneficio de la Asociación de Adultos de los sectores lago y cordillera de la provincia Omasuyos. La nota también menciona que no se permitirá el ingreso de la Policía y persecución a las autoridades originarias.
La ejecutiva de las mujeres campesinas Bartolina Sisa de la provincia Omasuyos, Beatriz Quispe, instó a los “satucos” (grupo liderado por el masista Gustavo Torrico) tomar el domicilio de Cárdenas, en Obrajes, tal como se había decidido en un reunión anterior, pero éste calificó la toma del inmueble como irracional. “Fue un acto de otra gente y no de los comunarios. Nos solidarizamos con el ex vicepresidente Víctor Hugo Cárdenas, tenemos diferencias, él representa a la tendencia neoliberal y nosotros respondemos al cambio”, pero eso no quiere decir que la gente deba actuar de esa manera.