Que Cindy Crawford tiene una genética estupenda resulta obvio. Y parece que ha transmitido su poderoso físico a su hija Kaia, de diez años. La pequeña debuta como modelo para la línea joven de Versace y en las imágenes de la campaña, el parecido entre madre e hija es muy llamativo.
Kaia se inicia así en el mundo que coronó a su madre en el selecto grupo de las supermodelos, que tuvieron su momento álgido en los 90, y que han conseguido mantenerse, décadas después, en la cresta de la ola. La pequeña Crawford no tiene el famoso lunar de su madre (a la que, por cierto, en los inicios de su carrera aconsejaron borrar), pero sí ha heredado cierto magnetismo ante la cámara.
Con la melena al viento (muy parecida a la de su famosa mamá), una minifalda negra, cazadora de cuero, sandalias planas y calcetines, Kaia arranca su curriculum con una de las grandes firmas de la industria de la moda. Habrá que ver si en un futuro decide seguir los pasos de Cindy.
Fuente: www.abc.es
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas