Ismael Schabib Montero*
Los entendidos en la materia señalan que el propósito del terrorismo es destruir el espíritu de una nación o clase, quebrantar su solidaridad; como escribió Aristóteles** “El primer propósito y fin de los tiranos es quebrantar el espíritu de sus súbditos”. En el método (modelo) cubano-venezolano, esto es algo vital, infundir temor y a veces terror. ¿Cómo se explica que los hermanos Castro perduren tanto en el gobierno manteniendo a su pueblo hambriento, empobrecido y en el pasado? Por el temor de ir a la cárcel. De la misma manera que lograron que el pueblo boliviano hubiera votado mayoritariamente el 2005 por el Sr. Morales, por temor. Para lograr este propósito, primero recurrieron a los “movimientos sociales”, una vez que se encaramaron en el poder captaron a las FFAA, la Policía Nacional y el Poder Judicial, y mediante ellos continúan sembrando el temor, especialmente en la oposición, los ejemplos están ahí. Con el invento del caso Rosza quebraron la unidad cruceña, con el billetazo y el temor, la unidad beniana. La matanza en “Porvenir” con el apresamiento del líder regional quebró la unidad pandina. Las FFAA han sido captadas por el billetazo y también por el temor, los señores generales que cumplen prisión en Sucre son el trofeo disuasivo.
Pero este sistema no se detiene en sembrar el temor, porque si bien atemorizar al oponente es vital, también es importante mantener la fachada de democracia, mediante “tontos útiles” permitiendo críticas que ellos administran y que usaran para demostrar a la opinión pública internacional que hay libertad de expresión en Bolivia, pero esas críticas las permiten cuando no se tocan temas muy sensibles, como ha sido denunciar la corrupción en Pando, departamento que tomaron a sangre y fuego, esto debe ser tan sensible que han detenido a la denunciante, a una senadora de la oposición, por lo que tendrán que pagar un costo de oportunidad. La gente que de alguna manera contribuyó con la causa de los indígenas del TIPNIS, otro tema sensible, sufre represalias. El apoyo moral que les dio el Gobernador del Beni acelero su destitución o fue la gota que rebalso el vaso. Pero el temor también lo infunden hacia a dentro, con los propios, como es el caso del General Cesar López, que está enjuiciado, y su esposa perdió un ojo cuando fue agredida en su propio domicilio, porque denunció el contrabando del actual ministro de la presidencia que le valió el mote de “Juan camión Quintana”, o como el caso de Yapacaní, que no han dudado en incriminar a unos jóvenes “montando” el caso, etc.
Otro aspecto es la victimización que utilizan en forma intermitente anunciando que lo quieren matar al Sr. Presidente, esto es muy importante para la exportación, porque es la manera mediante la cual el lobo se disfraza de cordero. También usan en el método los bonos y el desprestigio de los Partidos Políticos, esto último es importantísimo, porque los partido son el mejor freno contra los tiranos y fortalecen a la democracia, como sus principales actores, mientras los partidos políticos no se revitalicen, el gobierno masista gobernará a su antojo. A los partidos políticos los tienen agobiados y debilitados con sus líderes en el exilio atemorizados como Sánchez de Lozada del MNR y otros, o como al Ing. Guillermo Fortún, de ADN, pese a ser un anciano, está preso en San Pedro.
Si el MAS tiene de su parte a la Corte nacional Electoral y al Poder Judicial, así gane la oposición con mayoría absoluta las elecciones generales el 2014, esa victoria podrá quedar oculta en el fraude, como el que manejó el gobierno a su antojo para lograr los dos tercios que necesitaba en el parlamento, y disimular la paliza que recibió en las elecciones judiciales, para esto la denuncia y la advertencia oportuna a la comunidad internacional podría ser parte de una buena estrategia de una oposición unida.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
*Vicealmirante de la República de Bolivia
**Michael Walzer. “Guerras justas en injustas”. Goyanarte Editor S.A. 1980. Capital Federal. Argentina.