Jaime Cárdenas cumplía una condena a treinta años de cárcel por el asesinato de dos jóvenes universitarias ocurrido en Sucre el año 2010.
Foto El policial (internet)
Sucre, 2 abr (ANF).- La Policía Departamental investiga a cinco efectivos que pudieron estar relacionados con la fuga, el pasado viernes por la noche, del peligroso criminal Jaime Cárdenas, quien cumplía una condena a treinta años de cárcel por el asesinato de dos jóvenes universitarias ocurrido en Sucre el año 2010.
Fuentes de la dirección de penitenciarías informaron este lunes que el operativo para dar con el paradero de Cárdenas continúa desarrollándose sin pausa desde el viernes por la noche, cuando el reo se evadió del penal de San Roque saltando de una pared de alrededor de cuatro metros de altura, pese a que cumplía un régimen especial en una sección para internos de alta peligrosidad.
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Las informaciones sobre el operativo en sí todavía son escuetas debido, según explicaron responsables de los organismos de seguridad, a que éstas requieren la discreción necesaria con el objeto de lograr la recaptura del peligroso sujeto.
Sin embargo, tampoco se descarta, según esas versiones, algún tipo de complicidad en ciertos niveles que están siendo objeto de una investigación interna, por lo que no se han brindado mayores detalles y menos se han revelado identidades.
El subcomandante de la Policía, Roberto Ledezma, declaró a medios locales que muy probablemente Jaime Cárdenas todavía se encuentre oculto en algún punto de la ciudad, por lo que se han activado los mecanismos de control adecuados.
Según pudo constatar la ANF este lunes, el muro por el cual aparentemente se produjo la fuga del criminal se encuentra a muy pocos metros de una de las torretas de control del penal, la que da a la parte este del recinto, donde se advierte que la misma carece de los elementos de seguridad elementales, como un vallado de acero.
Cárdenas fue condenado por el asesinato de Marfa Delgado y Nairoby Muñoz, dos estudiantes universitarias, y además confesó haber dado muerte a otras 30 personas en diferentes departamentos del país.
La sentencia condenatoria fue leída el pasado 6 de diciembre de 2011, en una audiencia en la que Cárdenas lanzó una botella de plástico hacia donde se encontraba la fiscal encargada del caso, quien también fue amenazada por familiares de otro de los condenados.
El fiscal del distrito de Chuquisaca, Weimar Guzmán, dijo este lunes que tanto la fiscal del caso como otros funcionarios que llevan adelante procesos delicados gozan de protección policial.
Jaime Cárdenas estaba recluido en un lugar reservado para reos peligrosos a la espera de que concluyan los trámites para el traslado al penal de alta seguridad de Chonchocoro, en La Paz, cuyas gestiones habían quedado demoradas al parecer por la falta de recursos económicos.