A cuatro minutos del final, la alegría en Oriente se transformó en lágrimas. Es que los albiverdes no podían creer que otra vez se les fue el título de entre las manos. El empate de ayer ante Nacional Potosí, en la Villa Imperial, le negó al equipo de Erwin Sánchez ganar el Clausura, pues igualó en la primera posición con The Strongest y San José, pero la mejor diferencia de gol favoreció al Tigre, que se quedó con la copa del mejor. Oriente ganaba por 2-1 y The Strongest vencía a San José, por lo que la mesa estaba servida para los jugadores, para los dirigentes y para los cerca de 200 barras que llegaron hasta la Villa Imperial con la ilusión de alzar el trofeo de campeón; sin embargo, el gol de Gabriel Ríos en la recta final selló un empate que dejó sin reacción a los albiverdes, que terminaron pagando caros algunos errores, puntualmente en este duelo decisivo.
La falta de precisión en los volantes de marca la sintió la creación, pues Mojica y Aguirre no encontraban buenas sociedades; es que no tenían el complemento de Santiago Raymonda, que estaba en el banco, y que tras su ingreso le cambio la cara. Pero eso fue más adelante. En la primera parte, el equipo albiverde no respetó la idea de juego de ‘Platiní’, esa de tener siempre el balón y jugar a ras del piso, ya que la poca generación de juego obligó a abusar del pelotazo para buscar alguna arremetida de Peña, que en esos casos parecía como único delantero, ya que Vargas era una especie de enganche.
El sub 20 esta vez tuvo un buen encuentro. Los locales no querían regalar nada y así lo demostraron. A los 4 minutos, Gastón Mealla recibió un balón por la banda derecha de Oriente, donde Zabala no estaba firme. Llegando al área grande, Mealla envió un centro a ras del piso que Brau no pudo despejar y dejó el balón a Gonzalo Garabano, que la colocó a la izquierda de Hugo Suárez, que nada puedo hacer. Oriente quiso reaccionar, pero el nerviosismo lo hizo impreciso y perdió la brújula. Una oportunidad clara tuvo Mojica, a los 9′, cuando, tras combinación con Peña, al borde del área sacó un zurdazo encontrando bien parado al arquero Matías Garabano. Nacional era más peligroso, pues Mealla y Garabano ganaron varias veces las espaldas de la última línea refinera, que sufrió mucho. Mealla erró, a los 17′ y los 26′, al quedar solo ante Suárez, que ganó el duelo al rechazar pelotas frontales.
Mojica tuvo otra chance en la primera parte tras un pase de Vargas desde unos 35 metros del arco rival, pero su disparo se fue arriba por centímetros. Cuando se terminaba el primer tiempo, Vargas quedó frente al arco, pero su disparo con izquierda se fue por arriba del travesaño. En la segunda parte, Sánchez no movió el equipo. En la primera jugada, Vargas queda con el balón en el área y saca un derechazo que se desvía en Santos Amador y el balón se eleva colgando al portero Garabano, que se sorprendió. Mojica tuvo otra chance, pero su disparo con derecha lo detuvo Garabano.
Sánchez decidió que a los 60 minutos era el momento de Raymonda, por Vargas. Ni bien ingresó el volante argentino, Oriente tuvo más claridad y profundidad. A los 23, Raymonda hizo una ‘pared’ con Mojica, que le devolvió el balón dentro del área, desde donde el argentino sacó un derechazo que se iba al ángulo, pero el portero de Nacional la sacó. La alegría albiverde llegó a los 71′. Raymonda cedió un gran pase para Aguirre, que desbordó por derecha y luego entregó el balón a Mojica, que estaba en el medio del borde del área grandes y que luego de dar una media vuelta entregó un pase entre líneas a Peña, quedando solo ante Garabano, al que venció colocándole el balón a la izquierda.
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El festejo en la tribuna, donde estaba el titular albiverde, Miguel Ángel Antelo, celebró doble porque en Oruro el Tigre estaba ganando y eso daba el título a los albiverdes porque sumaban 39 puntos. Pero Platiní sorprendió queriendo cerrar el duelo cuando faltaban 15 minutos sacó a Peña y metió a Ronny Montero, que debía reforzar la zaga, pero esta se vio confundida, pues perdieron las marcas y el empate de Ríos llegó tras un centro desde la derecha y el potosino apareció solo para anotar de cabeza. El error fue de Zabala, que perdió el balón en el medio y ocasionó un contragolpe de los locales. Era el minuto 86 y ya no había tiempo para reaccionar. Ni bien terminó el partido, varios jugadores se dejaron caer al piso y no aguantaron las ganas de llorar.
Fuente: Unitel.
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