El día después de la derrota con Chile, el seleccionado nacional, Gustavo Quinteros, todavía estuvo molesto con la tarea del ecuatoriano Alfredo Intriago. Su enojo aumentó porque se le vino a la memoria el gol que le anularon a Marcelo Martins en el juego frente a Colombia, también en el estadio Hernando Siles. “Fue la segunda vez”, resumió. De paso expresó su preocupación por la terna que tendrá a su cargo el lance del sábado contra Paraguay. La Conmebol designó al uruguayo Roberto Silvera, quien será asistido por sus compatriotas Mauricio Espinosa y Carlos Pastorino. “Sí, me preocupan los árbitros que van a venir. Contra Colombia le anularon un gol legítimo, el sábado no nos cobran dos manos claras contra Chile, que según criterio del árbitro no fue así. Estoy muy preocupado por que incidan directamente en el resultado, nosotros fallamos goles, pero el árbitro no convalida situaciones y eso afecta en el resultado”, sostuvo Quinteros.
Se lamentó porque Bolivia no tiene peso en la Conmebol y que sus reclamos pueden caer en saco roto. Igual, el estratega piensa emitir su voz para que le escuchen. “Viene cualquier árbitro y nos roban los partidos, no nos cobran penales legítimos, es algo que tenemos que aguantar. Somos humildes, por eso hay que soportar que vengan a nuestra casa y que nos anulen cosas legítimas”, destacó. Como sucedió en la conferencia de prensa después del partido, también admitió que la falta de gol está pasando una factura alta.
Dijo estar confiado de que esa falencia será superada en el partido del sábado contra los paraguayos. “Sólo dos cosas espero para el siguiente partido, hacer los goles y que los jueces no nos perjudiquen, el partido (contra Chile) fue vergonzoso, nosotros no tenemos las armas para protestar, no podemos hacerlo”. Desde su punto de vista los medios debían ser más duros con el ecuatoriano Intriago.
Se quejó porque considera que no hubo apoyo para los reclamos. “No hacemos fuerza por nuestra selección, siempre van a venir acá y nos van a hacer lo mismo. Si hubiera ocurrido con Brasil o con Alemania todo el mundo hubiera pataleado, todos habrían coincidido en sus quejas protestas, pero nosotros somos humildes”, concluyó el estratega. El DT fue el único que pidió hablar, quiso quitar cargas y responsabilidades a los jugadores, quienes también tienen el mismo criterio de que los árbitros no midieron con la misma vara.
Fuente: Unitel.
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