Indígenas permanecen valientes aunque lloran la quinta muerte por la defensa del Tipnis


Tipnis. Aldo Moreno, que se encontraba tetrapléjico luego de un accidente, murió ayer en La Paz. Sus restos son velados desde anoche en instalaciones de la Cidob en la ciudad de Santa Cruz.

Indígenas permanecen valientes pese a muerte de un corregidor del Tipnis

Luto despide a marchistas.

image El Diario, La Paz



Con una misa católica, entre sollozos y dejando La Paz, los marchistas velaron a su compañero para luego dirigirse al oriente boliviano.

El presidente de la Subcentral Tipnis, Fernando Vargas, manifestó que pese al sensible fallecimiento del corregidor Aldo Moreno, la novena marcha indígena aún debe permanecer firme para luchar con valor en la defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis).

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Moreno sufría de cuadriplejía luego del accidente sufrido hace un mes en el recorrido de la columna hacia la Sede de Gobierno. Por otro lado, el deceso de este comunario retrasó el retorno de los marchistas hasta hoy a las 9 de la mañana.

“Aunque nuestro hermano haya muerto, su alma está con nosotros. Es un hermano que ha ofrendado su vida por la defensa del territorio. Esta lucha ha terminado con cuatro muertos y un hermano paceño. Siempre dije que si era necesario ofrendar la vida lo íbamos a hacer”, lamentó Vargas.

Sin embargo, el representante al dirigirse a sus compañeros, trató de infundirles ánimo, afirmando que éste es un motivo para luchar “con más coraje por la defensa del Tipnis”.

“El Presidente es un ser humano y todo esto que nos hizo lo pagará, no porque nosotros lo ajusticiemos sino porque hay un Dios que cuando rebasamos en nuestros errores nos sanciona. Que esto no sea un bajón para nosotros, mis hermanos, es importante seguir adelante aún con más coraje, porque no peleamos por nosotros sino por nuestra Casa Grande que es el Tipnis”, citó.

Asimismo, la presidenta del Comité de la Novena Marcha Indígena, Bertha Bejarano, informó que la deuda que ahora los marchistas deben pagar al hospital Arco Iris por el costo por la internación de Aldo Moreno y su tratamiento, asciende a más de Bs 120.000, aunque la administración del nosocomio adelantó que asumirá gran parte del monto en solidaridad.

Por su parte, el líder de los comunarios de Tierras Altas, Rafael Quispe, responsabilizó al Gobierno central y las principales autoridades del Ejecutivo por este fallecimiento.

“Es culpa de su soberbia, que no nos quiso escuchar, esperemos que no haya más muertos, porque hemos prometido resistencia”, citó.

Según el relato del hermano de Aldo Moreno, Salomón, el corregidor habría pedido en la madrugada de este viernes, que le quitaran los tubos a los que estaba conectado en la sección de terapia intensiva, sin poder movilizarse por la grave e irreversible lesión que afectó su cuello y columna vertebral.

En tanto, en las primeras horas de ayer, el dirigente Fernando Vargas con un grupo de delegados se dirigía a hacer los trámites necesarios para conseguir el transporte que terminaría de trasladar a los comunarios a sus regiones. Sin embargo, al recibir una llamada telefónica que les comunicaba el penoso hecho, se dirigieron al hospital donde confirmaron la penosa noticia.

“Cuando yo le dije que se iba a quedar una semana más, él me dijo que quería irse con nosotros y en verdad que se va con nosotros”, dijo Vargas en sollozo.

Aldo Moreno, corregidor de la comunidad Nueva Vida, falleció a los 37 años de edad, dejando huérfana a su única hija de 14 años. Estuvo internado 28 días en el hospital Arco Iris. Su cuerpo fue trasladado ayer a Santa Cruz para posteriormente llevar sus restos desde Trinidad hacia su comunidad.

En Santa Cruz, en la sede de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob), el ejecutivo de esta organización, Adolfo Chávez, realizó un velorio simbólico junto a los indígenas de las distintas regiones que lo acompañan en la vigilia de protesta, en contra de la nueva directiva instaurada.

El retorno de los comunarios de Tierras Bajas, se retrasó aun un día más. Apenas un grupo de 120 personas partió ayer y hoy a las 9 de la mañana viajarán, todos los que quedan.

FRASE

“Es un hermano que ha ofrendado su vida por la defensa del territorio. Esta lucha ha terminado con cuatro muertos y un hermano paceño”. Fernando Vargas, líder indígena.

Marchistas lloran la quinta muerte

El corregidor de la comunidad Nueva Vida del Tipnis, Aldo Moreno Antezana, accidentado en Yungas, falleció ayer. Es velado en la Cidob.

La novena marcha se cobra una nueva víctima

Tipnis. Aldo Moreno Antezana, que se encontraba tetrapléjico luego de un accidente, murió ayer en La Paz. Sus restos son velados desde anoche en instalaciones de la Cidob

image Luto. El cuerpo de Aldo Moreno fue velado ayer en el coliseo de la Universidad Mayor de San Andrés de la capital paceña. Foto AFKA

Marco Chuquimia. La Paz, El Deber

A los pies de una “cruz moxeña” y envuelto en una bandera del patujú, el símbolo que flamearon los indígenas de la novena marcha, yace el cuerpo sin vida de Aldo Moreno Antezana, corregidor y marchista de la comunidad de Nueva Vida en el Alto Sécure y adonde será trasladado después del velorio que le tributan hoy sus compañeros en la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob) en Santa Cruz. Es la cuarta víctima mortal de la caravana.

“El Gobierno nos tiene que respetar y no puede entrar en nuestra Casa Grande sin pedir permiso, nosotros no vamos a entrar en Palacio sin su permiso”, fue la última declaración pública que realizó Moreno a radio Erbol cuando la columna se encontraba en El Sillar. Profético, la marcha no ingresó en Palacio porque el Gobierno mandó custodiar y reprimir a los que llegaron de las tierras bajas.

El 19 de junio fue el día más trágico que vivió la marcha; ese día, un accidente de tránsito en el sector de Senda Verde, muy cerca de la población de Yolosa, se llevó la vida de dos dirigentes del pueblo tsimane, Silvia Cunay y Alejandro Cayuba; mientras que el cuerpo de Aldo Moreno y de otros tres dirigentes llegaban a hospitales paceños para ser atendidos.

“El día que llegó al hospital diagnosticamos traumatismo raquimedular, lo que lo dejó en estado tetrapléjico, no podía mover manos ni pies, luchamos por su vida, a pesar de ello, el día de hoy falleció al cuidado y la compañía de su papá”, resumió ayer el director del hospital Arco Iris, Ramiro Narváez.

Moreno, de 34 años y con una hija que también estaba en la columna junto a su madre, conocía de su estado y estaba plenamente consciente de que no volvería a caminar y pedía volver a su comunidad. La marcha partía hacia sus comunidades y él era el único que quedaba; su papá, Salomón Moreno, dijo que se quedaría en La Paz hasta que su hijosea dado de alta y trasladado a su comunidad; pero no sabía cómo iba a pagar la cuenta hospitalaria. Ayer cumpliría 24 días de estar internado en ese hospital y según relataron funcionarios, él pedía que ya no “lo entuben”. Su estado de ánimo había decaído desde que se enteró que había perdido toda motricidad.

La cuenta clínica oscilaba entre los Bs 60.000 y 80.000; después de su partida, nadie quiere mencionar las cifras, hubo reuniones entre funcionarios de la Alcaldía de La Paz y el hospital, el ministro de Salud, Juan Carlos Calvimontes, había ofrecido ayuda del Gobierno para pagar la cuenta y el traslado del cuerpo hasta su tierra natal; nunca se supo, pero el hospital liberó el cuerpo del malogrado dirigente a las 11:30 y sus compañeros lo llevaron hasta el coliseo de la UMSA, donde se improvisó un velatorio. “Los pueblos, caciques y dirigentes quedamos con la misión de no rendirnos nunca por defender el territorio”, dijo a manera de despedida el iniciador de las marchas indígenas, Marcial Fabricano.

El ataúd con sus restos mortales llegó anoche al aeropuerto Viru Viru y luego fue llevado a las instalaciones de la Cidob, donde son velados.

El Comité pro Santa Cruz organiza para hoy una caravana que acompañará la llegada de los indígenas. Ingresarán a la plaza 24 de Septiembre y luego habrá  una verbena en la Cidob.

Vigilia en defensa del parque

Es el último día de permanencia de los indígenas; hasta el mediodía se tiene previsto que parta el último bus con indígenas hacia Trinidad; otro vehículo viajará con dirigentes y corregidores hacia Santa Cruz, donde permanecerán en vigilia en instalaciones de la Cidob, luego de denunciar el ‘plan divisionista’ del Gobierno, que impulsó una dirigencia paralela que pretende tomar esa edificación.

“Retornamos a nuestra Casa Grande, con la frente alta para defender nuestro patrimonio, retornamos seguros de haber dejado en el sentimiento de cada uno de los paceños, alteños, el pueblo boliviano y el mundo entero, el coraje para enfrentar con sabiduría cualquier amenaza que melle la dignidad de los pueblos indígenas (…) nos comprometemos a continuar con la resistencia porque una vez más hemos comprobado que no estamos solos”, refiere la última ‘carta abierta’ firmada por los corregidores de todas las comunidades que estuvieron en la marcha.

El dirigente Rafael Quispe recordó que el Gobierno debe cuidarse de cometer errores que después no pueda solucionar, porque dijo que existe el pleno convencimiento de evitar el ingreso de las comisiones a las distintas comunidades.

A esta advertencia se suma la falta de consenso en las comunidades, la aplicación de los resultados de la consulta por mayoría y la  inasistencia de veedores internacionales para este procedimiento, que según el ministro de Obras Públicas, ingresará en su segunda fase este 29.

Aldo integró la comisión ante la OEA

Aldo Moreno Antezana fue parte de los nueve corregidores indígenas que defendieron  en la 42º Asamblea de la OEA realizada en Cochabamba,  la no construcción de la carretera por el corazón del Tipnis.

“Aldo caminó a mi lado. Fue mi apoyo”, recuerda con expresiva molestia Adolfo Chávez, dirigente de la Cidob. Chávez aseveró que durante la octava marcha Aldo fue guardia indígena representando a su comunidad de Río Sécure y, durante la novena caminata, Aldo encabezó  junto a él la marcha.

Miran Yubanore, dirigente de la Central de Pueblos Étnicos Moxeños del Beni (Cpemb), recordó a Aldo como un joven luchador que pidió hasta los últimos momentos, cuando aún podía hablar, que el Gobierno escuchara las demandas para que no hubiera violencia.

“Ha fallecido un hermano. Queremos hacerle un velorio grande para que después pueda retornar a Trinidad para que sea enterrado junto a toda su familia, que lo espera allá”, dijo Yubanore.

La dirigente recordó además que tras un encuentro con los corregidores del parque nacional resolvieron “decomisar y no dejar entrar las embarcaciones, movilidades o a funcionarios públicos o privados que intenten ingresar por el Tipnis”.