El húngaro Toazo afirma que no vino al país para hacer terrorismo. Fiscal no descartó posibilidad de que los acusados no hubiesen participado en atentado a casa del Cardenal.
CON EL ROSTRO CUBIERTO • Elot Toazo y Mario Tadik, acusados de terrorismo en el país, son internados por policías a la cárcel de San Pedro, en la ciudad de La Paz. Ocurrió ayer.
LA RAZÓN
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El fiscal Edward Mollinedo no descartó ayer la posibilidad de que las personas que se hallaban en el hotel Las Américas no hubiesen participado de manera directa en el atentado a la casa del Cardenal. Dijo que se busca a más implicados.
El fiscal Edward Mollinedo abrió la posibilidad de que los presuntos terroristas, tres eliminados y dos detenidos en un operativo policial, no sean los autores materiales del atentado al domicilio del cardenal Julio Terrazas.
“No precisamente, hay muchas personas que han tenido participación (en el atentado), todos los nombres los estamos poniendo en reserva”, señaló ayer Mollinedo al ser consultado por La Razón si los presuntos terroristas son con exactitud los autores materiales del ataque ocurrido la madrugada del miércoles en la ciudad de Santa Cruz.
En el operativo realizado la madrugada del jueves en el hotel Las Américas, en el centro de la urbe cruceña, policías abatieron a Eduardo Rozsa Flores (boliviano), Dudier Michael Martin (irlandés) y Magyarosi Árpak (rumano). Además, detuvieron a Elot Toazo (húngaro) y Mario Tadik Astorga (boliviano-croata).
El fiscal descartó que todos ellos sean sicarios (personas que asesinan por dinero) y se refirió a los mismos como “terroristas”.
Explicó que este apelativo se relaciona con “grupos organizados, armados, que tienen un líder y buscan un objetivo. Eso es lo que está pasando aquí”.
Según Mollinedo, Rozsa “era uno de los que estaba a cargo de todo ese grupo que estaba en el hotel”. Sin embargo, indicó que aún se desconoce si los que estaban en ese lugar coordinaron el atentado a la casa del Cardenal.
El jueves, autoridades del Ejecutivo dijeron que los presuntos terroristas atentaron contra la casa de Terrazas y alertaron de que hay otras células que tendrían en la mira a autoridades del oficialismo, como el Presidente y el Vicepresidente; y de la oposición, como el Prefecto cruceño.
“Pese a que la Policía dijo que todo está controlado, éstas son personas muy bien organizadas, pues aparte de estar conectadas vía internet, tienen otros sistemas de conexión entre ellos (…). No son sólo las personas fallecidas y detenidas los miembros de esta organización, hay otras personas que están siendo buscadas”, aseguró Mollinedo.
El gerente del hotel Las Américas, Hernán Rosel, afirmó a La Razón que los supuestos terroristas no salieron de sus habitaciones la noche del atentado.
Por su parte, el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, Miguel Gonzales, informó que los análisis en los laboratorios de balística y explosivos determinaron que los residuos de elementos plásticos coinciden con una tapa de basurero (empleada en el atentado) que se encontró en el hotel Las Américas.
Tras su audiencia cautelar, los dos detenidos fueron enviados ayer a la cárcel de San Pedro.
Toazo afirma que no vino al país para hacer terrorismo
AUDIENCIA • El detenido dijo que viajó desde Hungría para trabajar en una agencia de viajes y que ya en Bolivia supo de la banda criminal.
El ciudadano de nacionalidad húngara Elot Toazo dijo que vino a Bolivia para laborar en una agencia de viajes y que no sabía que iba a trabajar para la banda acusada de terrorismo en el país.
La revelación la hizo en la audiencia de medidas cautelares que ayer determinó la detención preventiva de él y de Mario Francisco Tadik Astorga (boliviano-croata); ambos imputados por el delito de terrorismo, a denuncia del Ministerio de Gobierno.
Fuentes oficiales, que prefirieron mantener el anonimato, dijeron a La Razón que Toazo relató que en su país trabajaba en el área de Sistemas de una entidad bancaria y que fue traído al país por un boliviano para laborar en una agencia de viajes.
Agregaron que Toazo admitió ser el “encargado de informática” de la presunta banda de terroristas; mientras que Tadik señaló que se ocupaba de la correspondencia de la organización.
Según un reporte de la agencia de noticias en línea de Hungría Index —reflejado por el Wall Street Journal—, la hermana de Elot Toazo, Edit, aseguró que su hermano no es un terrorista y que fue a Bolivia para buscar empleo en tecnologías de la información. El reporte agrega que la mujer estaba “en shock” a causa de la noticia del arresto.
La jueza 7º de Instrucción en lo Penal, Betty Yañíquez, informó que decidió la detención de los imputados porque “se ha establecido la probabilidad de autoría” en los hechos investigados por el Ministerio Público.
En cuanto a los obstáculos para la indagación, la magistrada indicó que “se ha demostrado específicamente (que existe) riesgo de fuga” en los acusados.
Se negó el acceso a los medios
Los medios de comunicación no tuvieron acceso a la audiencia de medidas cautelares de los acusados de terrorismo porque ésta fue de carácter “reservado”.
Periodistas, camarógrafos y reporteros gráficos que fueron ayer a cumplir con su trabajo, fueron obligados a desalojar no sólo el juzgado en el que se desarrolló la audiencia, sino también el edificio de la Corte Superior de Justicia de La Paz.
Los medios se encontraban en el lugar desde las 16.00, para cubrir una audiencia previa, y permanecieron en él hasta cerca de las 2.30, cuando comenzó el segundo proceso. El resto del tiempo, hasta casi las 4.30, lo pasaron en la calle y a la intemperie, esperando alguna declaración.
La jueza a cargo, Betty Yañíquez, justificó lo reservado de la audiencia por el pedido de los abogados de la defensa y por el carácter de la investigación iniciada por el Ministerio Público.
Acusados de terrorismo, Tadic y Tóasó ya están en San Pedro
Los fiscales pidieron que fuesen recluidos en Chonchocoro o Cantumarca
Ingreso: el boliviano croata Mario Tadic Astorga y del húngaro Elöd Tóasó, cubiertos, entran en San Pedro
LA PRENSA
Los fiscales pidieron que los dos acusados fuesen recluidos en un penal de máxima seguridad.
Bajo el argumento de que existen indicios de que cometieron el delito de terrorismo, la juez Betty Yañíquez dispuso la detención preventiva del boliviano croata Mario Tadic Astorga y del húngaro Elöd Tóasó al cabo de una audiencia de medidas cautelares cumplida la madrugada de ayer entre las 02.00 y las 04.30.
Los dos fueron capturados la madrugada del jueves en un todavía no aclarado operativo policial desarrollado en el hotel Las Américas, de Santa Cruz de la Sierra, acción en la que murieron tres presuntos mercenarios e integrantes de un grupo terrorista de ultraderecha que supuestamente tenía la intención de atentar contra la vida del Presidente, el Vicepresidente, otras autoridades y particulares.
Los fallecidos fueron identificados como Jorge Eduardo Rozsa Flores, de 48 años, nacido en Santa Cruz pero croata por naturalización, héroe de la Guerra de los Balcanes y coronel del ejército de Croacia; Michael Martin Dwyer, irlandés de 24 años de edad en cuya red social de internet figuraba en fotografías con uniforme militar, y el rumano con pasaporte húngaro Árpád Magyarosi.
Durante la audiencia de medidas cautelares, que se llevó a cabo en medio de estrictas medidas de seguridad y a puerta cerrada, la comisión de fiscales que investiga el caso aparentemente logró acceder a la información contenida en las computadoras personales secuestradas en la mencionada acción.
Se conoció incluso que los fiscales alquilaron un equipo multimedia para exponer sus argumentos a fin de sustentar la imputación de terrorismo que pesaba sobre los arrestados.
La magistrada acusó Tóasó y Tadic Astorga al establecer la existencia de “elementos de convicción” sobre “acciones violentas” de los imputados, por lo que ordenó su detención.
Las medidas de seguridad comprendieron incluso cubrir los rostros y parte del cuerpo de los procesados con frazadas a objeto de que no sean reconocidos ni identificados.
Las abogadas defensoras de los ahora detenidos solicitaron, para preservar sus vidas, que
sean recluidos en un sector completamente aislado de la cárcel de San Pedro.
Los fiscales solicitaban que fuesen remitidos a alguno de los dos penales de máxima seguridad, el de Chonchocoro, en La Paz, o el de Cantumarca, en Potosí, a pesar de que allí solamente llegan aquellas personas sobre quienes pesan sentencias ejecutoriadas.
El fiscal Edward Mollinedo se excusó de ofrecer mayores detalles sobre el particular porque se trata de un caso en el que está comprometida la seguridad del Estado, aunque confirmó que la imputación formal es por el delito de terrorismo.
Este tipo penal se sanciona con privación de libertad de entre 15 y 20 años, según la legislación vigente en el país.
La juez Yañíquez informó que pidió tanto al gobernador del penal, coronel José Oswaldo Cabrera, como al director nacional de Régimen Penitenciario, Jorge López Arenas, que dispongan todas las medidas que sean necesarias para proteger la integridad de ambos reclusos.
Por lo avanzado de la hora, al concluir la audiencia, los presuntos terroristas fueron conducidos de regreso a las celdas de la Policía Judicial.
Alrededor de las 11.00, la juez Yañíquez llegó al edificio del Tribunal Departamental de Justicia, donde hizo los trámites legales requeridos para el traslado de Tadic Astorga y Tóasó al panóptico nacional.
Hacia las 13.00, las gestiones estuvieron listas. Vehículos policiales ingresaron al patio del Palacio de Justicia y llevaron en un rápido operativo a los acusados al principal penal paceño.
Una hora y media más tarde, llegó una unidad motorizada en medio de una gran escolta. Primero bajaron dos personas cubiertas con sábanas y fueron introducidas al recinto penitenciario por el ingreso de Gobernación, sin embargo, instantes después entraron los verdaderos.
Presidio de 15 a 30 años
El artículo 133 del Código Penal estable textualmente lo siguiente: “El que formare parte, actuare al servicio o colaborare con una organización armada destinada a cometer delitos contra la seguridad común, la libertad de locomoción o la propiedad, con la finalidad de subvertir el orden constitucional o mantener en estado de zozobra, alarma o pánico colectivo a la población o a un sector de ella, será sancionado con presidio de 15 a 20 años, sin perjuicio de la pena que le corresponda si se cometieran tales delitos”.
Este tipo penal forma parte del capítulo de los delitos contra la tranquilidad pública, entre los que se cuentan la instigación pública a delinquir, apología pública de un delito, asociación delictuosa, organización criminal, terrorismo y desórdenes o perturbaciones públicas.
Dentro del acápite correspondiente a los alzamientos armados contra la seguridad y soberanía del Estado, el Código Penal instituye penas de presidio de 15 a 30 años para aquellas personas que “organizaren o integraren grupos armados irregulares, urbanos o rurales, bajo influencia interna o externa, para promover enfrentamientos armados con fuerzas regulares o de seguridad pública, o para cometer atentados contra la vida y la seguridad de las personas, la integridad territorial o la soberanía del Estado”.
Pistas
La defensa de los acusados pidió que sus clientes sean recluidos en el penal paceño.
Las abogadas creen que sus representados correrían peligro si quedaran en libertad.
Un aparatoso operativo permitió el traslado de los dos detenidos al panóptico.