Jimmy Ortiz Saucedo
Noticia: Traban salida de 50.000 toneladas de soya (El Deber 24-07-12).- Asustado. Así está el personal que administra la terminal portuaria de Puerto Aguirre, luego de comprobar que el comunicado de la Aduana Nacional de Bolivia (ANB) que indica frenar toda actividad comercial de importación o exportación tuvo su impacto directo en el negocio exterior de Bolivia, afectando también al de Brasil.
Comentario: Comienza a percibirse, con total claridad, una nueva ofensiva de Evo Morales contra Santa Cruz. Ya lo conocemos, sabemos de su odio por esta tierra y su gente, ya no nos engaña. Insiste en seguir frenando nuestro desarrollo económico y social, perjudicando también a Bolivia.
Conocemos también su modus operandi. Sabemos que siempre se escuda en sus sectores sociales (SS), que maneja como títeres, para validar sus políticas. No otra cosa fue la reunión con sus SS en el coliseo del Plan 3.000.
Las recientes visitas a Santa Cruz de Su Excelencia, del Vicepresidente y de otros ministros, nos hacen presagiar nuevos día de sufrimiento. Estos siniestros personajes no nos visitan por que les gusta Santa Cruz, nos visitan porque necesitan amarrar algunos cabos sueltos.
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Necesitan conversar con sus aliados locales para sumarlos a la ofensiva. Ya se los ha visto públicamente con varios de ellos. Los usarán mientras sean necesarios, después los desecharán, como papel higiénico.
Los desecharan como desecharon a CIDOB, a las ONGs, a Filemón Escobar, Pedro Lima, Adriana Gil, Alejandro Almaraz y otros. Ayer eran sus útiles aliados, hoy sus enemigos "íntimos".
La aceleración del proceso contra el Gobernador electo de Santa Cruz no es casualidad, tampoco lo es la lucha en el Consejo Municipal, la auditoria de tierras, el fracaso del Mutún, la reaparición del lúgubre Fiscal Soza, las trabas a nuestras exportaciones de soya en Puerto Aguirre, la destrucción de Bellas Artes y otros. Todo esto obedece a una gestión planificada al estilo del Capitán Quintana, el de los gusanos.
Y mientras tanto en La Paz construirá un teleférico de 235 millones de dólares y dará un préstamo de 100 millones de dólares para los transportistas de esa urbe.
Santa Cruz tiene que poner las barbas en remojo. Las autoridades, instituciones y líderes regionales, que todavía quedan de nuestro lado, deben coordinar acciones y prepararse para lo que viene. Lo propio tiene que hacer la sociedad en su conjunto. El tirano nos tiene nuevamente en la mira, como en la época del Cerco a Santa Cruz del 2008.
El gobierno debiera atacar con el mismo ímpetu, al narco estado que cada día nos corroe el alma. Debiera hacer frente a los carteles de la droga que nos indica la prensa extranjera. Ya no es solo la prensa nacional la que nos lo recrimina, ayer fue Veja de Brasil, hoy el Universal de México, mañana no dudo que será otro.
El gobierno debiera atacar con el mismo ímpetu, su brutal corrupción interna. Debiere compensar destituyendo a Carlos Villegas, heredero de Santos Ramírez, en su empresa estrella, la estatal petrolera YPFB.
Negros nubarrones se ciernen nuevamente sobre nuestro pueblo. Sigamos resistiendo a la tiranía de Morales, como ayer resistimos a Melgarejo, a García Meza y a Goni Sánchez.