Periodistas de Bolivia se movilizaron por la libertad de expresión a pesar de restricciones y en rechazo al juicio que el Gobierno de Evo Morales inició contra tres medios.
Denuncia penal de Evo contra tres medios moviliza a los periodistas
ANTECEDENTE. El Gobierno los acusa de haber distorsionado las palabras de un discurso del Presidente, lo cual provocó críticas en su contra de los dirigentes regionales del oriente.
EFE / La Paz – 29/08/2012 (Página Siete)
Protestas de periodistas en La Paz. Henry Ponce / Página Siete
Periodistas se manifestaron hoy en varias ciudades de Bolivia para rechazar la denuncia penal del Gobierno del presidente Evo Morales contra tres medios de comunicación, que es la primera demanda en 30 años de democracia presentada desde el poder político con la intención de enjuiciar a informadores.
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Periodistas de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz se movilizaron hoy, como en días pasados lo hicieron sus colegas de otras ciudades del sur y el occidente, para exigir respeto a la libertad de prensa y acusar a Morales de amedrentar con juicios e inducir a la censura.
En La Paz, decenas de informadores hicieron un mitin ante el Palacio de Gobierno, situado en la Plaza Murillo, que estuvo cercada por agentes que impidieron, en medio de incidentes, a otro tanto de periodistas sumarse a la protesta ante las oficinas del mandatario.
"El poder político está amedrentando la libertad de expresión e induciendo a la censura y la autocensura en este país", afirmó a Efe el presidente de la Asociación de Periodistas de La Paz, Antonio Vargas, que encabezó el mitin.
La semana pasada el ministerio de la Presidencia presentó ante la Fiscalía de La Paz la denuncia penal por una supuesta "incitación al racismo" en contra de la Agencia de Noticias Fides, de propiedad de la Iglesia católica, y los periódicos Página Siete y El Diario. El Ejecutivo los acusa de haber distorsionado las palabras de un discurso del mandatario, lo cual provocó críticas en su contra de los dirigentes regionales del oriente de país.
En su discurso del 15 de agosto, Morales dijo que "en el oriente boliviano, donde todo el año se produce, yo digo solamente por falta de voluntad podemos ser tan pobres o no poder tener alimento, mientras en el Altiplano (occidente) es diferente: si hay helada, si no hay lluvia, si hay granizada, no hay alimento, es una verdad eso, pero en el oriente no, solo por flojos podemos hambrear".
Según el Gobierno, los medios tergiversaron con titulares como "Evo dice que si se hambrea en el oriente es por flojera", "Evo acusa de flojos a los habitantes del oriente" y "Morales opina que el oriental es flojo y le critican por discriminador". El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, aseguró hoy que las autoridades respetan a los medios de comunicación pero que se han sentido preocupadas y dolidas por la reacción que, a su juicio, provocaron esos titulares.
Los medios afectados rechazan haber cometido un error o un delito en su trabajo y sostienen que la Constitución establece que para las denuncias de funcionarios contra las publicaciones debe aplicarse la Ley de Imprenta, de 1925, y no recurrir al Código Penal.
El Defensor del Pueblo, Rolando Villena, respaldó hoy esa posición en una rueda de prensa en la que dijo que "si el Gobierno entiende que los medios señalados han vulnerado alguna norma, debe procesar su denuncia en el marco de la Ley de Imprenta vigente, según lo instruye la propia Constitución".
El director del diario Página Siete, Raúl Peñaranda, sostuvo que las denuncias del Ejecutivo son "un hito negativo para la democracia y la libertad de expresión". Subrayó que es la primera vez en los 30 años de democracia en Bolivia que se cumplen en octubre próximo, que el poder político denuncia penalmente a periodistas porque los antecedentes se remontan a los tiempos de las dictaduras.
"Lo que quiere el Gobierno es amedrentarnos y que la próxima vez que haya un discurso polémico de alguna autoridad, una metida de pata de una autoridad, nos callemos, pero no lo van a lograr", dijo Peñaranda. La dirigente del sindicato de El Diario, Carmiña Moscoso, afirmó hoy en un discurso que se limitaron a transcribir las palabras de Morales, por lo que no pueden ser considerados "discriminadores".
El secretario ejecutivo de la Federación de Trabajadores de la Prensa de Bolivia, Ramiro Echazú, protestó porque la fiscalía ha comenzado a actuar para investigar a los periodistas por difundir el "lapsus" de Morales, pero no avanza en las decenas de denuncias que están en la impunidad de agresiones contra los periodistas.
Morales, que ha dicho varias veces que los medios son su única oposición y sus enemigos, vive el nuevo episodio de enfrentamiento contra los periodistas, tras otros protagonizados antes por la promulgación de polémicas leyes que los informadores consideran que atentan contra la libertad de expresión.
Periodistas se movilizaron por la libertad de expresión a pesar de restricciones
La policía boliviana activó el cerco policial a la plaza Murillo y llegó a gasificar a los periodistas de la ciudad de El Alto en su intento de ingresar a “kilómetro cero”.
Movilización de los trabajadores de la prensa. Foto: ANF
La Paz, 29 ago (ANF).- Trabajadores de la prensa de La Paz y El Alto realizaron una movilización de protesta en la sede de gobierno a pesar del fuerte operativo que activó la policía boliviana para evitar el desarrollo de esta movilización en la plaza Murillo. Los comunicadores rechazan la demanda interpuesta por el Gobierno contra la Agencia de Noticias Fides (ANF) y los periódicos "Página Siete" y "El Diario" por reproducir un discurso gubernamental.
La Policía instaló barreras de seguridad en cuatro esquinas del perímetro exterior de la plaza Murillo desde las 06.00 y un numeroso contingente controlaba que sólo ingresen funcionarios públicos con su respectiva credencial. Un grupo de periodistas acreditados al área política ingresaron a las 9:00 horas para realizar la cobertura a una declaración de prensa del ministro, Carlos Romero en Palacio Quemado.
Ante este panorama, se realizaron dos movilizaciones en “repudio a la penalización de la información” simultáneamente. Una al interior de la plaza Murillo con los periodistas que lograron ingresar, y en puertas de Palacio de Gobierno desarrollaron un mitin de protesta. En los alrededores se desarrolló otra marcha con mayor concurrencia encabezada por la prensa de la ciudad de Alto y con la participación trabajadores de diversas áreas.
Al promediar las 11:00 horas los periodistas que lograron pasar el cerco policial intentaron unirse con sus colegas en la esquina de las calles Comercio y Yanacocha, pero la policía intentó evitar esta acción utilizando incluso agentes químicos contra los trabajadores de la prensa.
Finalmente, las marchas se unieron y continuaron las protestas en céntricas calles de la ciudad hasta culminar un mitin en puertas del ministerio de Comunicación. “Procesos, metralla, la prensa no se calla”; “Libertad de prensa sí, dictadura no”; “Periodistas si, flojonazos no”, fueron algunos de los cánticos de la espontánea manifestación. En tanto, las pancartas que mostraron los trabajadores de la prensa señalaban: “Encarcelen el hambre, encarcelen el desempleo no la información”; “Libertad de expresión, muera la penalización”; “Los periodistas no somos criminales, ni responsables de las expresiones de políticos”
Los trabajadores de base y secretarios de generales de los medios de comunicación de La Paz y El Alto convocaron a la marcha en defensa de la libertad de expresión, el derecho al trabajo y en repudio a la penalización de la información.
El Gobierno presentó una denuncia ante el Ministerio Público contra la Agencia de Noticias Fides y a los periódicos “Página Siete” y “El Diario” por el supuesto delito de “difusión e incitación al racismo o la discriminación”. La acusación ha sido rechazada terminantemente por los tres medios.
Reacciones
El secretario Ejecutivo de la Confederación Sindical de Trabajadores de la Prensa en Bolivia (Cstpb), Ramiro Echazú afirmó que la defensa de los medios enjuiciados se ha convertido en un movimiento nacional que exige; el respeto a la libertad de información, libertad de prensa, libertad de expresión y fundamentalmente de la ley de imprenta.
“Una vez más el poder político está amedrentando a la prensa boliviana pero no lo vamos a permitir y las movilizaciones continuarán. La ley de imprenta es un patrimonio no sólo de presa sino del pueblo boliviano”, afirmó el ejecutivo nacional.
La dirigente de base de los trabajadores de prensa de La Paz, Carmiña Moscoso lamentó las agresiones contra periodistas y la intención de modificar la ley de imprenta. Alertó además que estas acciones están dirigidas a encarcelar a periodistas como si el ejercicio periodístico fuera una acción delincuencial.
“Estamos en estado de emergencia, eso significa que cuando convoquen a algún periodista, algún editor, algún director, nosotros vamos a ir primero a la fiscalía carajo. A ver si se atreven a meternos a la cárcel, nosotros vamos a ir a la fiscalía a pedirles cuenta del por qué no meten a la cárcel a violadores, tratantes de órganos y narcotraficantes”, afirmó
A su turno, el dirigente de la prensa la ciudad de El Alto, Leopoldo Ibarra dijo que su sector ha determinado dar un plazo de 72 horas para que el gobierno retire las demandas contra los tres medios o de lo contrario advirtió con radicalizar las medidas
“Estamos aquí para decirle al gobierno que le damos 72 horas para que retire esa demanda judicial injusta que además atenta a la libertad de expresión y no tiene ningún asidero legal toda vez que la ley de imprenta está vigente y la constitución Política del Estado autorregula la labor de la prensa, al mismo tiempo declaramos enemigos y traidores a quienes quieren amedrentar a los trabajadores de la prensa de Bolivia”, afirmó Ibarra.
Para el presidente de la Asociación de Periodistas de La Paz (APLP) Antonio Vargas, la acción penal iniciada por el gobierno de Evo Morales es un “nefasto” antecedente no sólo para la prensa sino para la democracia en Bolivia y manifestó su “plena solidaridad” con los tres medios la Agencia de Noticias Fides (ANF), el periódico Página Siete y El Diario.
“Este es el momento mostrar mucha cohesión y espíritu de cuerpo entre las organizaciones de periodistas para no permitir esta nueva arremetida en contra de la libertad de expresión. No solamente es un precedente como dijo el ministro Romero, sino que es un amedrentamiento directo a la prensa y la democracia en el país”, aseveró el representante.
A su turno, el presidente de la Asociación Boliviana de Radiodifusoras (Asbora), Raúl Novillo Alarcón manifestó su preocupación y descontento por el desacierto gubernamental y recordó que la ley de imprenta está en vigencia y la Constitución Política del Estado lo reconoce.
“Es una señal muy desagradable para libertad de prensa y expresión en Bolivia. En un estado democrático, este es un precedente muy negativo y nosotros obviamente como dirigentes de los medios seguiremos trabajando a favor de que se entienda de que la democracia no es condicionada a ciertas cosas, sino simplemente que se tiene que respetar los principios básicos que es la liberta de expresión de todo ciudadano”, explicó Novillo
En tanto, el presidente de la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia, Ronald Grebe resaltó el trabajo de los periodistas en todo el país y afirmó que se continuará defendiendo la vigencia de la ley de imprenta y recordó que las autoridades deben ser las principales en hacer cumplir la Constitución política del Estado.
“Me parece terrible, porque el día de mañana seguramente porque somos flojos o nos da flojera dejemos de entrar a palacio de Gobierno, a la Cancillería y al poder Legislativo por flojera vamos a dejar de cubrir lo que dicen los parlamentarios y lo que dicen los gobernantes, ese día la población se va a sentir absolutamente desinformada”, lamentó Grebe.
Periodistas protestan en rechazo al juicio que el Gobierno inició contra tres medios
La protesta se produjo bajo la estricta vigilancia de un cerco policial que fue instalado en todas las esquinas de acceso a ese centro del poder y que en principio impidió el ingreso de los comunicadores.
La Razón Digital / Baldwin Montero / La Paz
Desde dos frentes en la plaza Murillo, periodistas de distintos medios de comunicación protestaron esta mañana en rechazo al juicio penal que el Gobierno inició contra tres medios de comunicación, a los que acusa de haber tergiversado declaraciones del Presidente Evo Morales para incitar al racismo y la discriminación.
La protesta se produjo bajo la estricta vigilancia de un cerco policial que fue instalado en todas las esquinas de acceso a ese centro del poder y que en principio impidió el ingreso de los comunicadores.
Alrededor de 40 periodistas, entre dirigentes del sector y quienes habitualmente cubren la información que se produce en el Palacio de Gobierno y la Asamblea Legislativa Plurinacional, iniciaron una protesta en pleno centro de la plaza principal de La Paz, mientras al otro lado del cerco un número similar encabezado por dirigentes de la Confederación Sindical de Trabajadores de la Prensa de Bolivia hizo lo mismo, con apoyo de megáfonos y carteles para reclamar por la libertad de expresión.
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, explicó que el cerco policial fue instalado precisamente para impedir el ingreso de la movilización, “al igual que ocurre con cualquier marcha de protesta”. No obstante, pidió disculpas a los periodistas que en principio fueron impedidos de ingresar hasta la plaza Murillo para cumplir con sus labores diarias. “Como Ministerio de Gobierno nos excusamos de este mal entendido”, dijo.
Los periodistas de La Paz, al igual que a principios de esta semana ocurrió en otras partes del país, convocaron para las 10:30 de hoy a una marcha en rechazo al juicio que inició el gobierno contra la Agencia de Noticias Fides (ANF) y los periódicos Página Siete y El Diario.
El lunes, periodistas de Potosí, El Alto, Sucre y Trinidad también expresaron en las calles de sus respectivas regiones su rechazo al juicio. Además, se declararon en estado emergencia en defensa de las libertades de expresión y de prensa.
El Gobierno inició un proceso penal contra los tres medios de comunicación por considerar que cometieron el delito de "difusión e incitación al racismo o a la discriminación”, tipificado en el Código Penal, al haber tergiversado una declaración que hizo el presidente Evo Morales el 15 de agosto durante su participación en una feria de productos del programa Empoderar en Tiwanaku.
El Presidente afirmó entonces: “En el oriente boliviano todo el año se produce, sólo por falta de voluntad podemos ser tan pobres y no tener alimentos. En el altiplano es diferente; si hay helada, lluvia o granizada no hay alimentos pero en el oriente sólo por flojos podemos hambrear”.
ANF tituló al día siguiente “Evo dice que si hambrea en el oriente es por ‘flojera’”. Página Siete tituló Evo acusa de flojos a los habitantes del oriente, mientras que El Diario escribió: Evo opina que el oriental es flojo y le critican por discriminador.