La Paz. El dirigente de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI), Rafael Quispe, presentó ayer una denuncia sobre la falta de esclarecimiento de la violenta represión ejercitada por la Policía en contra de la octava marcha indígena en Chaparina, ante Mutuma Ruteere, relator especial de Naciones Unidas sobre racismo.
DIRIGENTE. Rafael Quispe, CAOI
El 25 de septiembre del año pasado, en Chaparina, los indígenas de tierras bajas y altas que participaban en esa marcha, fueron agredidos por efectivos policiales.
La razones. Quispe dijo que entre los menores que fueron agredidos por la Policía que intervino la marcha se encontraba su hija quien debido a los golpes sufrió 14 días de impedimento, al igual que la hija de Cancio Rojas, dirigente de Mallku Quta.
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“Presentamos esta demanda a Naciones Unidas porque vemos que, hasta el momento, no se logró avances considerables en el caso y queda en la impunidad la masacre de Chaparina, pues las autoridades se hacen de oídos sordos”.
La Prensa – 10/09/2012