El propietario de Mi Barrunto lamentó que algunas personas hayan expresado «algún odio personal» respecto a la visita del jefe del MAS a su negocio.
Fuente: paginasiete.bo
El propietario de la cevichería donde Evo Morales comió en Lima, Perú, lamentó que haya gente que está «un poco alterada, dolida y triste» después de que se hicieron virales las imágenes del expresidente mientras saboreaba comidas típicas en su local.
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«Nosotros somos una empresa peruana y, antes que todo, no discriminamos a ninguna persona (…). Hay gente que está un poco alterada, dolida y triste (por la atención que se dio a Morales)», declaró al portal de noticias Aweita el dueño de la cevichería Mi Barrunto, Augusto Sánchez.
Evo fue atendido en ese local el jueves el 12 de agosto. Allí le enseñaron a preparar ceviche y se sacó fotos con el personal.
Sánchez cuestionó que algunas personas hayan expresado «algún odio personal» respecto a este tema, lo que para él es algo «netamente político».
El expresidente reveló a través de su cuenta de Twitter que visitó Perú para atender una invitación por parte del Fenate Perú —sindicato fundado por el presidente Pedro Castillo— para que sea ponente del foro “El papel de las organizaciones populares en los cambios políticos, económicos y sociales en América Latina”.
Durante su estadía en el país vecino Morales fue visto en algunos de los restaurantes más prestigiosos de la capital limeña y se alojó en un esclusivo hotel.
Además se trasladó vehículos oficiales y en todo momento estuvo escoltado por personal de seguridad del Estado, lo que motivó críticas y reclamos en la oposición del mandatario Pedro Castillo.
