Industria hidrocarburífera se derrumba; Bolivia importaría gasolina

Esto demuestra una de las consecuencias de la “nacionalización”, lo que puede llevar al sector a un virtual colapso a corto plazo.

image

El campo petrolero Surubí en el trópico. – Redacción central | Los Tiempos



Ven que industria hidrocarburífera se derrumba

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

Bolivia podría importar gasolina

Los Tiempos

La Paz | Agencias. Con muy pocos proyectos exploratorios, reservas cada vez menores y una producción a la baja de manera continua, la industria hidrocarburífera nacional está congelando la oferta de productos derivados para el mercado interno y externo. Estas fueron algunas de las conclusiones expuestas ayer en el Foro “Situación actual y perspectivas del sector hidrocarburos en Bolivia”.

El Foro, organizado por la Cámara Nacional de Industrias (CNI) y el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) en La Paz, advirtió también que la dramática disminución de ingresos por exportaciones de gas natural, llevará al país ante un eventual desplome del sector más emblemático del proceso de “nacionalización”.

“Se nos cae toda la estantería. Nuestro máximo de producción resulta insuficiente para satisfacer la demanda interna y para cumplir los compromisos con los mercados externos”, sostuvo Carlos Miranda Pacheco, ex ministro de Hidrocarburos y ex superintendente sectorial.

Miranda calcula que Bolivia percibirá este año alrededor de 1.500 millones de dólares por la exportación a los mercados de Brasil (1.139 millones), Argentina (290 millones), y la venta en el mercado interno (89 millones), cifra que representa casi la mitad de los ingresos percibidos el año 2008.

Baja la producción

Durante su exposición, Miranda destacó que tras la “nacionalización” de hidrocarburos ejecutada por la administración de Evo Morales Ayma se mantienen los 37 contratos de operación, los cuales, sin embargo, no cambiaron el escenario para bien siendo que ahora en el país apenas se tiene cinco pozos exploratorios de los cuales sólo dos se hallan en ejecución, mientras que anteriormente llegaron a un número de 65.

Sin nuevos pozos productivos, se calcula que las reservas de petróleo condensado alcanzan a los 341 millones de barriles y alrededor de 17,5 trillones de pies cúbicos de gas natural, indicadores en las que se advierte una baja en el nivel de reservas.

A nivel de refinación,  las dos plantas en poder de YPFB habrían alcanzado en 2007 su capacidad máxima con  un promedio de 43.500 barriles diarios, pero por la menor disponibilidad de líquidos en 2008 redujo el procesamiento a 38 mil barriles. Esto ha provocado una reducción en productos refinados (gasolinas, diesel y jet fuel).

Este año el déficit de gasolina estará en 515 metros cúbicos por día, tomando en cuenta que la producción llegará a un promedio de 2.156 metros cúbicos por día (MCD) y la demanda a 2.671 MCD. La capacidad productiva llegó al tope tanto extracción de condensado como de refino, señaló Miranda.

Bolivia está al borde de importar gasolina para atender la demanda interna, añadió. En tanto que ejecutivos de YPFB, en días pasados ya habían señalado la posibilidad de esta compra para garantizar el abastecimiento del mercado interno que es obligación y prerrogativa de la estatal.

Principales observaciones

Las exportaciones de hidrocarburos a Brasil y Argentina reportaron ingresos por 3.132 millones de dólares en 2008, representando casi el 50 por ciento del total de exportaciones bolivianas.

Los ingresos por la venta de gas natural se reducirían a 1.508 millones de dólares para este 2009, lo que implicará un virtual desplome de las mismas. Las fuentes de ingresos: Brasil 1.139 millones; Argentina 280 millones; y mercado interno 89 millones.

Sería loable abrir un proceso de diálogo sincero que arribe a un consenso entre el Gobierno y la sociedad y la entidades afectadas con el eventual recorte presupuestario para no derivar en conflictos sociales y en un ejército de desempleados en la calles.

En las labores de exploración, el Estado tiene suscritos 37 contratos de operación en el marco de la nueva normativa. Se trata de las mismas áreas, compañías y tiempos pactados. El arribo de inversiones se ha plasmado en acuerdos con la rusa Gazprom y la venezolana Pdvsa, sin avances significativos más allá de la asignación de áreas de trabajo. Existen cinco pozos exploratorios, de los cuales tres se hallan en espera y dos en ejecución. Esto demuestra una de las consecuencias de la “nacionalización”, lo que puede llevar al sector a un virtual colapso a corto plazo.

×