Samsung pretende que su buque insignia, el Galaxy S III, esté en la brecha por mucho tiempo. Para lograrlo, ha seguido una estrategia que no es nueva ya que, por ejemplo, Nokia supo explotarla durante mucho tiempo con sus terminales Symbian y parece que quiere repetir con su gama Lumia con Windows Phone. Realmente, la selección de un color u otro no debe modificar en nada las prestaciones internas del terminal, ni su funcionamiento, ni su precio, simplemente se trata de darle al usuario final otra alternativa de elección más allá de los típicos colores.
Samsung en USA
El fabricante coreano no ha tenido nada fácil la comercialización de sus equipos en Estados Unidos debido a la constante amenaza “judicial” por parte de Apple. A pesar de los contratiempos, los resultados comerciales del Galaxy S III, no solo no se han mantenido en este país, sino que han mejorado. De hecho, cuando se conoció la sentencia que condenaba a Samsung a pagar una multa a Apple por infracción de patentes en el mes de septiembre, las ventas del equipo subieron un 16%. Tal vez tanto pleito y tantas noticias en los periódicos procuraron una campaña de publicidad gratuita a Samsung que consiguió despertar la curiosidad de los usuarios finales. Pero es que aún hay más, la semana en que se presentó el iPhone 5, el Galaxy S III aumentó en un 15% sus ventas, algo curioso ya que lo lógico sería pensar que el modelo de Apple robaría clientes a Samsung. El caso es que el mercado USA ha hablado y tiene claro que los coreanos hacen buenos productos y que el iPhone 5, tal vez, ha generado cierta desilusión. Tendremos que esperar a final de año para determinar la evolución de los dos modelos.
Fuente: Movilzona
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