El ministro de Obras Públicas, Vladimir Sánchez, admitió ayer que el tramo II de la carretera San Ignacio de Moxos y Villa Tunari, que cruzará por medio del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis) no tiene diseño, plazos ni financiamiento para su construcción, pero aseveró que la vía sí se hará y ésta gozará de características “ecológicas”.
El ministro de Obras Públicas, Vladimir Sánchez, da informe sobre las obras ejecutadas por su ministerio a las organizaciones y al MAS, ayer, en Cochabamba. – José Rocha Los Tiempos
Sánchez indicó además que la oposición a la construcción de la carretara no es significativa ya que se trata de una pocas comunidas que no están de acuerdo con la vía y que tras la consulta la mayoría de ellas está de acuerdo.
“Se va construir una carretera ecológica y una carretera ecológica necesita un estudio importante para definir cómo se va construir, cuánto va costar y que el impacto sea el más reducido posible”, manifestó la autoridad gubernamental que llegó ayer a Cochabamba para presentar informe al Movimiento Al Socialismo (MAS) y organizaciones sociales regionales, sobre las obras ejecutados por ese ministerio en el departamento.
En su exposición como en declaraciones a la prensa, con relación al Tipnis, informó que lo que está claro y definido es que va ser una carretera ecológica, en base a lo cual se va empezar a trabajar. “No se tiene el diseño final, recién se va trabajar en diseño final”, dijo.
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La autoridad dijo que en base a ese diseño, que no está definido quién realizará, se buscará el financiamiento para la construcción de ese tramo.
En cuanto a la intangibilidad, dijo que por el mandato de la Ley 222, rechazada por los pueblos indígenas esa situación la Asamblea Legislativa está en la obligación de derogar esta ley.
“Tiene que derogarse la ley (primero) luego se buscarán recursos y se va trabajar en el diseño final, porque es una carretera ecológica requiere paciencia, estudio y mucha dedicación para poder definir bien”, explicó al anotar que para cumplir y copletar estos pasos no se han fijado plazos.
Sánchez dijo que están preparando el informe oficial de la consulta en cumplimiento del mandato de la Ley 222, al igual que el Tribunal Supremo Electoral, que presentará su reporte sobre el seguimiento que realizo de este proceso.
No obstante, el ministro dijo que los resultados cuantitativos ya se han dado a conocer: el 82 por ciento de las comunidades rechazaron la intangibilidad del Tipnis y el 80 por ciento aceptó la construcción de la carretera.
Consultado sobre si estos resultados son una derrota para los indígenas del Tipnis y activistas que rechazaron la consulta, dijo que ha sido una derrota no solo para ellos, sino “para todos los intereses articulados que vienen desde las empresas transnacionales, las organizaciones no gubernamentales (ONG) y los propios intereses de las grandes potencias que quieren preservar estos lugares para utilizar sus recursos.
“Rompió la armonía”
La presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb), Yolanda Herrera, denunció ayer que la consulta que realizó el gobierno en las comunidades del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis) dividió a las familias.
“Algo que nos ha preocupado es el nivel de división que se ha generado en las familias, en comunidades y que estaría afectando la autodeterminación de los pueblos (…) pone en riesgo la armonía, la confraternidad de los pueblos”, declaró a Erbol.
Herrera indicó que estas comunidades dependen de la armonía que exista en sus relaciones para sobrevivir, puesto que en épocas en que se presentan fuertes cambios climáticos ellos se ayudan los unos a los otros.
La presidenta de la Apdhb señaló que la consulta ha fracturado las relaciones en los ámbitos más altos como son las dirigencias hasta la estructura más profunda como es la familia; además, denunció que se ha quebrantado la unidad del movimiento indígena.
Los Tiempos, Bolivia