Consideran que la medida provocará la corrida de capitales extranjeros de Bolivia durante este 2013.
Con la nacionalización de las distribuidoras Electropaz de La Paz y Elfeo en Oruro, el Gobierno pretende monopolizar la cadena productiva de energía eléctrica, coincidieron en manifestar los analistas económicos Julio Alvarado y Pedro Vacaflor.
La medida que es considerada como política y apresurada, costará al país más de 100 millones de dólares. Alvarado sostuvo que el Ejecutivo intentó tapar los actos de corrupción apelando a una medida apresurada que tendrá un costo millonario para el Estado.
Analistas perciben que el Estado busca monopolio de la cadena de electricidad
El Diario, La Paz
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SORPRESIVAMENTE EL ESTADO TOMÓ LAS INSTALACIONES DE LAS EMPRESAS DE CAPITALES EXTRANJEROS.
La expropiación (nacionalización) de las empresas distribuidoras de energía eléctrica Electropaz de La Paz y Elfeo en Oruro, además de las de una empresa de servicios y una gestora de inversiones con capitales de la transnacional españoles Iberdrola, fue una medida política apresurada que provocará la corrida de capitales extranjeros del país durante este 2013, coincidieron en señalar dos analistas económicos.
Para el analista Julio Alvarado si bien el fondo de la “nacionalización” de las eléctricas fue una medida política, “lo evidente” es que el Gobierno busca el control del monopolio de la cadena productiva de energía eléctrica.
“Está claro que fue una medida política antes que económica. El Gobierno intentó tapar los actos de corrupción apelando a una medida apresurada que costará al Estado más de 100 millones de dólares”, dijo.
Asimismo puso en duda el alcance de la medida toda vez que hasta el momento no se logró controlar toda la cadena productiva de la distribución.
“Si el Gobierno pretende controlar toda la cadena productiva de la generación de energía eléctrica ¿por qué no intervino la Cooperativa Eléctrica de Santa Cruz?”, se preguntó.
Por su parte, el también analista Pedro Vacaflor puso en duda la nacionalización al señalar que más bien se trata de una compra de acciones por las cuales ahora el Estado deberá pagar una compensación “justa” como pide el gobierno español.
“Lo grave de estas medidas, más allá de ser políticas, son una mala señal económica para la atracción de capitales extranjeros, si comparamos las inversiones de países de la región como Perú que logra captar 2.000 millones de inversiones y Bolivia sólo 1.000 millones, esa relación nos demuestra los efectos de esta medida”, dijo.
Los analistas coincidieron en lamentar que cuando la era de las nacionalizaciones, supuestamente, ya estaban concluidas no existe una nueva Ley de Inversiones.
El sábado pasado, en medio de las denuncias de corrupción, el Gobierno nacionalizó las empresas de IberBolivia, filial de la española Grupo Iberdrola, las distribuidoras de electricidad en La Paz y Oruro, Electropaz y Elfeo, además de la Empresa de Servicios (Edeser) y la Compañía de Administración de Empresas (Cadep) y la propiedad de las cuatro empresas pasan a pertenecer a la Empresa Nacional de Electricidad (Ende).
Los analistas estimaron que el valor de mercado de las acciones de la empresa Iberdrola en Electropaz y Elfeo sería de 100 millones de dólares (75 millones de euros), según publicó este domingo el periódico español El País.
La filial de Iberdrola en el país es Iberdrola Bolivia y tiene el 89.5 % de las acciones en Electropaz en La Paz y el 92.8 % en Elfeo de Oruro. El Gobierno nacional decidió nacionalizar el total de estas acciones a favor del Estado.
El Gobierno español espera que Bolivia indemnice de forma justa y sin dilación a Iberdrola, después de que Evo Morales haya tomado la decisión de expropiar cuatro filiales de la eléctrica española, entre ellas las dos principales distribuidoras de electricidad de las regiones de La Paz y Oruro.
El Estado ya tiene participación en los tres eslabones de la cadena de electricidad, la generación, transporte y distribución.
El Gobierno expropió en mayo de 2012 las acciones de Red Eléctrica de España (REE) en la Transportadora de Electricidad (TDE).
El presidente Evo Morales nacionalizó en mayo de 2010, las generadoras de electricidad Corani SA, Guaracachi SA y Valle Hermoso SA, que operan en Bolivia y que estaban participadas parcialmente por capitales extranjeros y la Empresa de Luz y Fuerza de Cochabamba (Elfec).
El Jefe de Estado firmó los decretos supremos en la población de Corani, situada en la provincia Chapare del departamento de Cochabamba, que instruyen el traspaso de las acciones a la estatal Empresa Nacional de Electricidad (Ende).