Gustavo AngeloUno de los problemas de las ciencias sociales que se ha caracterizado por encontrarse en estado de indefinición teórica y metodológica a lo largo del pensamiento social, es el fenómeno de la cultura.Edgar Morin dice “Cultura”, falsa evidencia, palabra que parece una, estable, cerrada, cuando es realmente la palabra trampa, hueca, somnífera, doble, traidora. Para Gilberto Gimenez “la cultura resiste enconadamente a ser construida como objeto teórico y prefiere seguir circulando con la imprecisión flotante de sus innumerables aceptaciones ideológicas.Muchas veces se habla de cultura como sinónimo de formación social, o bien, del arte o de la literatura cultivada, o se la confunde con desarrollo social o con los adelantos técnicos y científicos de una sociedad determinada. La ambigüedad y uso indiscriminado de la palabra cultura ha conducido a terribles confusiones así como a la necesidad de darle una definición más rigurosa en el caso de su estudio.Según estimados de los culturólogos hacia la década de 1950 del siglo XX se contaba con 164 definiciones de la cultura, en 1970 existían 250 definiciones. Es muy curioso que por cultura los europeos entiendan; las personas cultivadas, ilustradas a la manera de la erudición occidental; una apología de la civilización capitalista. Es cierto que Europa llegó a dar la sensación de ser los dueños del mundo. Para ellos el hombre “primitivo”, selvático no poseía cultura alguna. (Rafael Lam)Hay una leyenda del botero que cruza en el río a un hombre muy ilustrado quien pregunta al botero. “Conoces a los clásicos de la cultura europea”, el botero le responde que no los conoces. –Has perdido la mitad de tu vida- replica el ilustrado. De repente se vira el bote y hombre al agua; entonces el botero pregunta al ilustrado. “Sabes nadar”, -no- contesta el ilustrado. “Entonces has perdido toda tu vida”, le ripostó el botero. Especialistas como Víctor Vich consideran tres actores en las políticas culturales: el Estado; la sociedad civil y la empresa privada; y el mercado. El Estado, como agente central, debe promover iniciativas a partir de una mayor inversión en la educación pública, infraestructura, inventarios patrimoniales, mejores servicios a los ciudadanos, etc. La sociedad civil es el actor privilegiado y destinatario de las acciones del Estado; pero a la vez debe ser la que encabece y movilice el contenido de las políticas culturales. Las preguntas para los tres actores que gestionan la cultura en el país son; ¿Cuál es la definición de cultura que se usa en el Estado, sociedad civil y empresas? ¿Tendrán su propia definición? conociendo que en 1970 existían 250 definiciones de cultura. La Unesco tiene su definición de cultura; «La cultura puede considerarse como el conjunto de los rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos que caracterizan una sociedad o un grupo social. Ella engloba, además de las artes y las letras, los modos de vida, los derechos fundamentales al ser humano, los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias.»Sosteniendo la hipótesis de que los actores de la cultura, “no saben identificar el problema cultural”; no puede haber una solución, causas de esas deficiencias son la mala gestión cultural en las ciudades del país, como por ejemplo en la ciudad de Sucre que se llegó a cerrar la biblioteca Pachamama.Para encontrar la solución al problema cultural, una de las opciones es el factor económico, donde varios economistas, ya están empezando a plantear modelos “econométricos” de la cultura, como el economista estadounidense Thomas Ghale Moore, o como lo hizo el economista venezolano Jose Antonio Abreau, creando un sistema de orquestas para niños en Venezuela, desde el punto de vista económico, fruto de esa creación Venezuela tiene las orquestas sinfónicas más reconocidas de Latinoamérica. La cultura en la actualidad debe tener un modelo cultural/matemático, porque ya se ha filosofado bastante sobre el tema de la cultura, ahora hay que plantear modelos exactos como los modelos económicos, de esa manera la cultura en el país dejará de ser la quinta rueda del carro.