Bolivia. Transportistas, fabriles, Central Obrera, panificadores y padres de familia anuncian medidas de presión contra el Gobierno para lograr que atienda sus demandas que buscan incrementos salariales, aumento de tarifas y precios para la gestión 2013.
Franklin Durán, dirigente de los transportistas de Bolivia. – Apg Agencia
Los transportistas han asegurado que precisan un incremento que va entre los 60 y 70 centavos al precio de los pasajes, que deberá ser autorizado por el Gobierno Central y negociado con las alcaldías. Los panificadores denuncian que el Ejecutivo no cumplió con la promesa de garantizar insumos para elaborar pan y aseguran que el precio subirá. Obreros y fabriles rechazan propuesta de aumento y padres de familia quieren mejoras en las escuelas.
Concluyeron las fiestas de fin de año y con ellas la tregua que existía entre las dirigencias de los principales sindicatos del país y el Gobierno, pues los incrementos salariales y las tarifas que regirán en la gestión 2013 empezarán a definirse en los diferentes ministerios de estas áreas y con presión social desde las calles.
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Los sectores que anunciaron el inicio de sus medidas de presión para los próximos días fueron los miembros de la federación del autotransporte, quienes aseguraron que, sí o sí, este año se incrementará el precio de los pasajes y, según informó el máximo ejecutivo de este sector, Franklin Durán, el monto del incremento debe oscilar entre 60 y 70 centavos, que se definirá con el Gobierno central, aunque aclararon que a nivel departamental cada federación de transportistas tendrá facultad para negociar estos montos con las respectivas alcaldías en las que prestan sus servicios.
Otro sector que exige inmediatas negociaciones con autoridades del Gobierno son los fabriles, quienes el fin de semana informaron que se establecerá el porcentaje del incremento salarial en base al monto que representa la inflación. El secretario ejecutivo de la Confederación Nacional de Fabriles, Víctor Quispe, anunció que el sector rechaza en forma anticipada la fijación del salario de este año sobre la base de 4,54 por ciento porque no refleja la realidad del aumento de precios, sobre todo de la canasta familiar.
Por otro lado, las diferentes cetrales obreras departamentales efectuaron reuniones para definir el monto de incremento salarial que consideran que su entidad matriz deberá exigir al Gobierno central. Por ejemplo, el máximo representante de los obreros en Santa Cruz, David Peña, sostuvo que el porcentaje de incremento debe bordear el 25 por ciento, porque “el porcentaje establecido por el Gobierno no alcanza para nada”. La reunión en la que se juntarán todos los ejecutivos de la COB del país se realizará el 14 de enero.
Los panificadores también advirtieron que subirán el precio del pan, pues aseguran que el Gobierno no cumplió con las promesas efectuadas, de garantizar los insumos para la elaboración, para evitar el incremento.
Para finalizar, los padres de familia del eje urbano de Bolivia exigen que se mejoren las unidades educativas, según informó el dirigente a nivel nacional, Franklin Gutiérrez.
Los Tiempos