Estados Unidos se adherirá a la política antidrogas del gobierno de Morales, según informó el «zar» antidroga de Bolivia, Felipe Cáceres.
El viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, explica a la prensa sobre las tareas de interdicción y erradicación de cultivos de coca excedente en el trópico de Cochabamba y los Yungas de La Paz. (Foto archivo ABI)
La Paz, 20 mayo (ABI).- Estados Unidos adherirá el concepto de respeto «a la dignidad y soberanía» de la política antidrogas de Bolivia, informó el martes el zar antidrogas del país andino Felipe Cáceres, en momentos en que ambos países intentan reencauzar la relación bilateral en unos cabildeos en La Paz.
«He recibido una comunicación de la embajada de Estados Unidos en Bolivia, en sentido de que tienen la voluntad y apertura total de ingresar a la política antinarcóticos, pero bajo el paradigma de respeto a la dignidad y soberanía» bolivianas, remarcó Cáceres en declaraciones a la ABI.
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De acuerdo con la autoridad boliviana, el gobierno del presidente Barack Obama, mediante su embajada en Bolivia, avisó que Estados Unidos se avendrá sin condición a la política de lucha contra el narcotráfico doméstica.
La declaración se registra más de un semestre después de que Washington «descertificara» la lucha antidrogas boliviana, por insuficiente y denunciara la proliferación de plantaciones ilegales, al tiempo de suspender, de un plumazo, las ventajas arancelarias para manufacturas, joyas de oro y maderas de industria boliviana, lo que La Paz consideró una represalia por la expulsión del embajador Philip Golberg, acusado de conspiración por el presidente Evo Morales.
La notificación fue hecha horas antes del arribo al país de la misión estadounidense que encabeza el subsecretario adjunto del Departamento de Estado de Estados Unidos para Latinoamérica, Thomas Shannon, que el miércoles se encontró en La Paz con el canciller boliviano David Choquehuanca.
De acuerdo con Cáceres, la línea conducente de la política antidrogas de Bolivia «no es objeto de dialogo ni negociación porque es una política de Estado enmarcada en la Constitución y la nueva estrategia antidrogas».
El funcionario pidió a Washington valorar el esfuerzo de la administración Morales que, en lo que va del año, erradicó 1.600 hectáreas de coca excedentaria en el Chapare y los Yungas bolivianos.
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) se incautó, entre enero y abril pasados, 10 toneladas de cocaína, casi 4 de ellas procedentes de Perú.
La fuerza antidrogas bolivianas destruyó entre 2006 y 2008 cerca de 17.000 hectáreas de cocales excedentarios.
Por ello, Cáceres valoró la misión que cumple la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), al mando del coronel. Carlos Ruck, y de la FELCN, en cabeza del coronel Oscar Nina.
El viceministro dijo que la lucha contra el narcotráfico no sólo es responsabilidad de los países considerados productores sino tiene que haber una corresponsabilidad de los consumidores y que demandan droga como Estados Unidos.