El vicepresidente del Estado Álvaro García Linera es otro abanderado de la doble moral gubernamental cuando expresa que el Senador de Convergencia Nacional (CN) Roger Pinto no tiene derecho al asilo que le concedió el Estado de Brasil ni al salvoconducto para trasladarse a esa nación, declaró hoy el diputado, Alex Orozco al defender el trabajo de fiscalización que realizan los legisladores.“Este tema no es una disputa entre el oficialismo y la oposición, sino entre el presidente del Estado Plurinacional de Bolivia Evo Morales y la presidenta del Brasil Dilma Rousseff, ya que fue esa nación la que otorgó, luego de un profundo análisis, asilo a Pinto”, señaló.Orozco explicó que lo único que la oposición pide al presidente Morales es que cumpla lo que firmó el pasado 12 de julio en la última reunión de mandatarios de los países miembros del Mercosur, encuentro en el cual varios presidentesde la región firmaron el documento denominado: “Decisión sobre el reconocimiento universal del derecho de asilo político” que reafirma el carácter de todo Estado de conceder asilo. La decisión añade que: “Este derecho no debe ser restringido ni limitado en su extensión, bajo ninguna hipótesis”.Los diputados de CN: Adrián Oliva, Alex Orozco, Luis Felipe Dorado y Gonzalo Romay denunciaron que esa decisión del Mercosur fue “ocultada” a los bolivianos por el gobierno de Morales a su retorno de ese encuentro oficial,” porque con este documento de rango internacional y carácter inapelable el Primer mandatario se obliga a otorgar salvoconducto al senador Pinto”, explicó Orozco.“Entonces, si García Linera cree que es un despiste pedir el cumplimiento de un compromiso internacional, además rubricado por el Presidente Morales, bajo esa lógica, la presidenta del Brasil tendría que ser otra despistada por haber concedido asilo a Pinto”, añadió el diputado opositor, quien considera que el vicepresidente es el más grande discriminador de Bolivia ya que responde cualquier cuestionamiento con amenazas e insultos porque se considera un iluminado dueño de la verdad.