El canciller interino Walker San Miguel declaró que pese a la extracción privada de los impresos, esperaba que alguna autoridad reguladora del Perú pudiera sancionar la temeridad.
En primer plano el ministro de la Defensa Walker San Miguel, estos días canciller interino (ABI)
La Paz, 25 jun (ABI).- El canciller interino Walker San Miguel expresó el jueves su indignación por los insultos que publicó la prensa peruana contra el presidente de Bolivia, Evo Morales, y exigió que las autoridades de ese país sancionen las diatribas.
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«Queremos manifestar nuestra profunda indignación por titulares de diarios en Perú que generan una suerte de insulto y diatriba. Es intolerable que se trate de esa manera a un presidente de altísima legitimidad como Evo Morales y que ha demostrado mayor lucidez que todos los mandatarios bolivianos. Esperamos que sean objeto de una sanción ante su contenido periodístico», dijo en declaraciones formuladas en Palacio de Gobierno.
San Miguel afirmó que prefería no pensar que las injurias publicadas contra el primer presidente electo indígena de Latinoamérica sean «resabios racistas en la prensa y en la opinión pública del Perú».
Declaró sentirse insultado por la prensa del país vecino y que pese a la extracción privada de los impresos, esperaba que alguna autoridad reguladora del Perú pudiera sancionar la temeridad.
Diarios privados de línea conservadora y liberal trataron a Morales «desbocado» y hasta se recomendaron «un tratamiento psicológico» por el contrapunteo que sostiene con su par peruano Alan García, al que el mandatario boliviano calificó como «el peor presidente» de ese país y que comparó con el ex mandatario de Estados Unidos George W Bush.
«Estamos seguros que si algún canal radio o periódico boliviano se refiriera con esos términos a cualquier presidente del mundo, se generaría una crítica similar a la que estamos haciendo», afirmó San Miguel.
La virulencia ha caracterizado en las últimas semanas las relaciones boliviano peruanas.
Lima acusó a Morales de interferir en asuntos de política interna por el envío de una carta pública a un cónclave internacional de indígenas, a fines de mayo, y poco antes que la policía peruana desatara un feroz represión sobre una manifestación de indígenas amazónicos que opuestos a la concesión de sus tierras a privados cerraron una carretera del nordeste de Perú.
En cambio La Paz ha acusado al presidente peruano García de torpedear las negociaciones marítimas entre Bolivia y Chile, al demandar a este último país ante el Tribunal Internacional de La Haya, además de desbaratar la unidad de bloque en la Comunidad Andina de Naciones.