Brasil quiere gas boliviano hasta 2030 bajo otras reglas

Brasil renovará el contrato de compra y venta de gas natural pero buscará negociar con Bolivia un precio más bajo por el hidrocarburo o menor volumen.

image Los Tiempos, Cochabamba

Infraestructura del gasoducto que lleva el energético a Brasil. Foto Los Tiempos.



Brasil renovará el contrato de compra y venta de gas natural que tiene con Bolivia y lo extenderá hasta 2030; sin embargo, las condiciones no serán las mismas, declaró el jueves a la revista Veja la presidenta de Petrobras, Maria das Graças Foster.

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Los empresarios brasileños presionan a su Gobierno para que actúe “duramente”, según el diario Valor, al momento de renegociar el precio del gas boliviano que para ellos ya es insostenible.

El panorama parece complicado, dice el analista Bernardo Prado, pues ya sea que Brasil opte por modificar el precio o volumen las regiones recibirán menos ingresos, caería la producción de líquidos y habría problemas de almacenamiento.

A pesar de los planes del Gobierno de Brasil de licitar y explorar el llamado gas no convencional en ese país, Foster dijo que no está previsto dejar de importar gas natural boliviano por lo menos hasta el año 2030.

“El gas boliviano es muy importante y con seguridad vamos a renovar el contrato actual (…) en otras bases: pero  creemos que vamos a tener éxito en la exploración de gas no convencional en Brasil”, dijo la ejecutiva de Petrobras a Veja. En la ocasión también recordó que la licitación de áreas con potencial hidrocarburífero no convencional en Brasil está programada para noviembre próximo.

Petrobras y Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YFPB) tienen un contrato denominado GSA (Gas Supply Agreement) que establece la compra venta de un volumen máximo de 31 millones de metros cúbicos diarios (MM3D) de gas natural y está vigente desde 1999 hasta 2019.

El sitio hidrocarburosbolivia.com recuerda que a inicios de la década de los 90 se firmó un acuerdo de exportación de gas boliviano a Brasil, hecho que comprometió a las autoridades bolivianas de entonces, iniciar un proceso agresivo de exploración de hidrocarburos para cumplir con este acuerdo. Fue hasta poco antes de la promulgación de la Ley de Hidrocarburos 1689, del 30 de abril de 1996, donde se consideran los aspectos técnicos inherentes a la construcción del Gasoducto de exportación al Brasil, el cual es operado por la empresa Gas Trans Boliviano.

Esta semana, empresarios de los tres estados del Sur y de Mato Grosso do Sul, que se abastecen exclusivamente con gas natural importado de Bolivia, señalaron que el tipo de cambio del dólar “disparó” el precio de ese insumo, haciendo insostenible comprarlo y restándole competitividad al sector, reportó la revista Valor.

El alza del dólar hizo que el precio del gas boliviano aumentara en 31 por ciento entre enero y julio de este año, según datos de la Compañía de Gas de Santa Catarina (SCGas).

Así, el precio sería el primer factor que Brasil pida considerar en la renegociación pues el contrato actual fija el precio en relación al dólar y el precio internacional del petróleo, una fórmula que crea distorsiones entre el monto cobrado por el gas boliviano y el monto en que esos estados pueden comprar gas brasileño. La diferencia entre el precio del gas doméstico y el importado llega a 26 por ciento, según datos de los distribuidores que operan con ambas fuentes.

Además del precio, Prado señaló que Brasil podría buscar negociar los volúmenes y fijar un contrato interrumpible, es decir, sólo por la cantidad de gas que necesite, lo que sería complicado pues habría que pensar qué hacer con los volúmenes que deje de comprar.

Brasil y Argentina son los únicos mercados actuales para el gas natural de Bolivia.

Ya en enero de 2012, el presidente Evo Morales pidió nuevas propuestas de mercado para el gas que se exporta a esos países, ante la posibilidad de que ya no requieran comprarlo y añadió que las plantas industrializadoras proyectadas no serían suficientes.

YPFB anunció varias veces que negociaba nuevos convenios para vender gas a Paraguay y Uruguay.

A la fecha, se concretó la exportación de gas licuado de petróleo (GLP) a Paraguay, país al que desde la semana pasada se envía 125 toneladas métricas día (TMD) a través de la empresa Trafigura.

El contrato de compra y venta entre esa empresa y YPFB fija un volumen mensual de 5.500 TM, según datos ofrecidos por un ejecutivo de la estatal petrolera al matutino La Razón.

$us 170 millones para explorar

El presidente Evo Morales promulgó ayer tres leyes de exploración en las áreas de Azero, Cedro y El Dorado-Oeste, en Santa Cruz, con una inversión de 170 millones de dólares.

Morales sostuvo que esos nuevos campos hidrocarburíferos permitirán dar “un gran salto” en la exploración en el departamento de Santa Cruz porque se prevé que esas áreas sean megacampos para reponer y aumentar reservas.

Las reservas de gas natural en Azero llegarían a 3 trillones de pies cúbicos (TCF), según la estimación de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y de las petroleras, que buscarán estos depósitos a más de cuatro kilómetros de profundidad. Con la meta de encontrar esta riqueza en la formación Huamampampa, las compañías Total y Gazprom invertirán 130 millones de dólares en tareas exploratorias, según el contrato.

Milenio: hay reservas para 15 a 19 años

Según análisis de la Fundación Milenio, las reservas de gas natural en Bolivia “sostendrían” el actual nivel de producción para los próximos 15 a 19 años. Considerando que a nivel internacional la situación boliviana se sitúa por encima del promedio, sin contar la situación de Venezuela, al año 2011 el promedio de los países seleccionados del indicador Reservas/Producción era de 12,7 años y Bolivia se situó por encima con 15,8 años.

Sin embargo, Milenio hace notar que también es útil observar que aquellos países que tienen indicadores por debajo de 10 años (como México y Argentina) actualmente se encuentran en un proceso de reformas en su sector hidrocarburífero con la finalidad de incrementar la participación privada, ya sea nacional o internacional, y lograr nuevos descubrimientos de yacimientos de gas natural.