Evo Morales nos sigue metiendo la rodilla…


Roger “Chiqui” Martínez Becerra*

ChiquiMartinez_thumb En octubre del 2010, Evo Morales jugaba un partido de futbol en La Paz contra un combinado de la Alcaldía de esa ciudad. Lo anecdótico de este partido fue la actitud del Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia que sin ningún reparo le mandó al descuido un rodillazo en los testículos a uno de sus oponentes que lo dejó inmovilizado y después tuvo que abandonar el campo de juego. Este tipo de actitud en el deporte no es tolerable y es motivo de una expulsión inmediata.

Con estos antecedentes, era de esperarse de que Evo Morales tenga esta misma actitud en el campo político, y no nos sorprende porque esa es su naturaleza, no sabe ni quiere jugar limpio en la política, así no los ha demostrado en los ocho años de su gobierno.



Evo Morales le viene metiendo la rodilla al pueblo boliviano desde que asumió el gobierno en el año 2005. Le metió la rodilla con la aprobación de la nueva Constitución Política del Estado, luego a los Pandinos con el Caso Porvenir, a los Cruceños con el Caso Terrorismo, a los indígenas con la represión a la marcha del Tipnis, al sistema judicial con su banda de extorsionadores, al Tribunal Constitucional con su reelección, a las regiones con el censo y por último a la democracia con su injerencia sistemática al poder legislativo y judicial.

Evos Morales le viene metiendo la rodilla a los bolivianos y lo seguirá haciendo con el único propósito de inmovilizar a sus oponentes para perpetuarse en el poder.

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Los bolivianos merecemos tener mejores autoridades, seamos más selectivos y más exigente con nuestro voto. No elijamos a ineptos para que manejen nuestro destino. Para tener un país de primer mundo hay que elegir autoridades de primera clase.

En el deporte a los malos jugadores se los pone al banco de suplentes para que aprendan a jugar limpio. En la política hay que marginarlos de los cargos públicos negándoles el voto para que aprendan a servir al pueblo y no servirse de él.

*Abogado


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