En la actualidad, la facturación en línea tiene tres modalidades, la primera se denomina computarizada en línea que básicamente genera información de la factura y, por otra parte, incorpora el QR para poder darle seguridad también a la factura; adicionalmente está la facturación electrónica en línea que aparte del contar con el QR, tiene la firma digital que cumple los requisitos que establece la Ley de telecomunicaciones y ese documento es válido e inclusive para hacer una transacción comercial, como el factoraje, por ejemplo, hay otros países como Chile donde la factura que emiten en línea y que tiene la firma digital permite generar un préstamo de un banco o en la Bolsa de Valores, entonces tiene ese objetivo también justamente la factura electrónica que se implementó y por supuesto falta el otro tramo que es ya utilizarlo como para poder generar recursos dentro de un negocio o empresa, adicionalmente a ello tenemos la facturación portal web en línea, que prácticamente tiene el código QR y además emite la factura en el sistema de impuestos nacionales, en el servidor de Impuestos Nacionales con mayores seguridades que la oficina virtual (anterior sistema utilizado). Para utilizar el sistema portal web se tiene que ingresar a la página del SIN y solicitar la autorización para que se le otorgue el usuario y la clave para generar las facturas que requiera en la cantidad que requiera.
Impuestos Nacionales también ha desarrollado sistemas gratuitos como es la computarizada en línea y la electrónica en línea, estos sistemas pueden ser descargados por los contribuyentes de la página web del SIN para ser instalados en el computador para poder emitir las facturas.
En Bolivia, en diciembre de 2021 se inició con la implementación de la facturación en línea con la planificación y preparación de los sistemas, en esa gestión ya 11.596 contribuyentes emitieron facturas en línea, 982.134 facturas y en términos de dinero 3.072 millones de bolivianos. Al 30 de junio de la presente gestión, se tienen 70.318 contribuyentes y esto representa del 30 al 35% del universo de contribuyentes. El SIN comunica de manera periódica el ingreso a esta modalidad de facturación por grupos de contribuyentes, tomando en cuenta variable como, por ejemplo, el monto del impuesto que pagan, la cantidad de facturas que emiten, el importe de las ventas, es decir, varios criterios. Inicialmente, se ha incorporado, por ejemplo, a los contribuyentes pricos, principales contribuyentes, a los grados y a partir de ellos se ha tomado ciertas variables, ciertos parámetros. Por ejemplo, hasta el 30 de junio se ha incorporado tres grupos y el cuarto grupo inicia precisamente este 1 de agosto y van a ingresar a la facturación en línea 42.092 nuevos contribuyentes.
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Las mejoras que podemos resaltar en la facturación electrónica en línea y la computarizada en línea, se da cuando la factura llega en tiempo real, en cuestión de segundos, la factura viaja virtualmente a Impuestos nacionales, esta verifica, le hace una encriptación con un código de seguridad y devuelve inmediatamente en segundos al vendedor y el vendedor envía la factura al comprador, ya sea al WhatsApp, SMS o en su caso al correo electrónico. Otra de las virtudes que tiene el sistema de facturación en línea está en la declaración jurada que tiene como obligación tributaria los contribuyentes, cuando generan el libro de compras y ventas de manera automática, el error de transcripción ya no existe, y se genera el formulario 200 del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y también del Impuesto a las Transacciones (IT), que es el formulario 400, pre llenados, y una sugerencia de declaración jurada en función a la información que justamente tiene el contribuyente y con esos datos si está de acuerdo confirma, declara y paga con QR, traspaso bancario o paga en una entidad financiera.
Entre otras mejoras, se da para los empleados dependientes que trabajan en empresas privadas o entidades públicas, cuando en la presentación del formulario 110, hoy en día se genera de manera automática, ya que está en línea el citado formulario, además el trabajador no tiene que estar adjuntando la factura física, porque la factura que está registrada en Impuestos nacionales con el QR, con la firma digital y tiene toda la validez legal para fines tributarios, tanto del comprador como también del vendedor.
En resumen, este proceso de implementación de la facturación en línea ha venido facilitando enormemente a los contribuyentes con los sistemas y la digitalización, evitando la transcripción y errores, automatizándose los medios de declaraciones juradas para cumplimiento de las obligaciones tributarias y pago de impuestos, lo cual contribuye al desarrollo del país y su economía.
Lic. Jose Luis Machaca Mamani, Auditor Financiero experto en Audit, Assurence & Tax