Exsacerdote y autoridad, hoy se destaca en la calle


Wilson Soria. Está casado, tiene un vehículo, una casa y actualmente se dedica a vender té. Confiesa que apoya el ‘proceso de cambio’ y alista su retorno al MAS.



Ref. Fotografia: Personaje. Wilson Soria junto a sus esposa, no solo se destacó como autoridad, también tiene dotes de buen vendedor.

Venga, pruebe las bondades del té Maca!, se escucha en el megáfono de una vagoneta  blanca, que se encuentra estacionada en la calle Cuéllar y avenida Cañoto. Es la voz de Wilson Soria (56), un exsacerdote, concejal y viceministro de Gobierno que ahora se gana la vida vendiendo jugos y paquetes de té Maca en la capital cruceña.



Después de un saludo cordial que incluye una degustación del té, la exautoridad también comparte el gusto y los sinsabores que le ha tocado vivir desde 2004, año en el que decide cambiar de hábito y de rutina hasta hoy. De celebrar misas los domingo en la parroquia Cristo Redentor de El Alto, pasó a sentarse al sillón del Concejo Municipal por el Movimiento Al Socialismo (MAS),  y paralelamente, contrajo matrimonio civil con Carolina Martínez. En 2010 fue invitado por el  Gobierno a la Dirección Nacional de Régimen Penitenciario, de cuyo cargo salió «asfixiado» de presiones políticas.

Realiza trabajo eclesial y político en La Guardia. Desde hace cuatro años vive en el barrio Monte Alto, ubicado en el kilómetro 9 del municipio La Guardia, donde realiza trabajo pastoral y político. Como laico apoya a los jóvenes en la catequesis y a las parejas en la preparación sacramental del matrimonio, además hace servicio académico en la universidad Salesiana. Y, como dirigente, preside la Junta Vecinal de su barrio (Monte Alto) y es delegado  del Control Social del Distrito 3 «El Carmen». Después de 10 años de su alejamiento de la Iglesia, Wilson Soria, no solamente ha conseguido ocupar cargos públicos y casarse, sino que también  tiene un vehículo,  una casa y un negocio propio. Confiesa que apoya el proceso de cambio y alista su retorno al Movimiento Al Socialismo (MAS).

¿Por qué decide dejar el sacerdocio en 2004? 
Fueron decisiones muy personales y Dios sabe las circunstancias. Fue un cambio con cosas buenas y malas. Evo Morales (quien entonces era dirigente del MAS) me hizo una invitación para ser candidato a alcalde en la ciudad El Alto, renuncié al sacerdocio y obtuve la primera concejalía. Lo hice como un servicio al pueblo a raíz de los acontecimiento de octubre negro de 2003.

¿Cómo ve el proceso de cambio del Gobierno de Evo Morales?.
La economía del país se encuentra estable, hay avances importantes en la infrestructura vial, así como también en la nueva currícula educativa (ha sido profesor del Profocom). También reconozco que hay muchas limitaciones y errores en el Gobierno. Todo lo que es corrupción tiene que ser encarado de manera decisiva por el Gobierno para garantizar un mejor servicio a la comunidad.

¿Cuáles son sus aspiraciones políticas?.
Estoy para apoyar la reflexión y la investigación ideológica, el análisis económico y el perfil de los diferentes proyectos sociales. Por ahora, estoy en la escuela de formación política del Movimiento Al Socialismo  (MAS). Yo dejo la alternativa de dar un servicio más concreto a la necesidad y confianza que pueda tener el Gobierno a mi persona. En concreto no tengo una aspiración específica si yo quisiera ser concejal, diputado o senador. Quiero ser sincero, no la tengo. Quiero  reiterar mis cualidades de siempre: la honestidad, un servicio profesional, coherente e integral, por lo cual el mismo Gobierno podrá calificar si soy una persona con las características que necesita.

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

¿Aceptaría alguna invitación de otra agrupación política? No, yo me mantengo en la militancia del MAS. En lo que pueda servir ahí estaremos al 100% en beneficio del país.

Mientras tanto, se forma profesionalmente dado que solo le falta la tesis para concluir sus estudios en la carrera de ciencias de la Educación, en la universidad Salesiana.

¿Qué proyectos tiene para el futuro? Estamos detrás de llevar adelante un gran proyecto que es la Comunidad Integral Productiva, en la cual intervienen niños, jóvenes y adultos. De manera integral se asume la producción, educación y actividades culturales. Ya tenemos el terreno para la ejecución del proyecto. La entrevista finaliza con varias confesiones:

«Si volvería a nacer, volvería a ser sacerdote», «la mujer es una compañera que complementa al hombre», dice Soria.

Fuente: eldia.com.bo