El juez chuquisaqueño tuvo una actuación regular en el triunfo de Oriente Petrolero sobre Wilstermann.
Dilio Rodríguez fue el árbitro encargado de impartir justicia en la victoria (2-1) de Oriente Petrolero sobre Wilstermann, por la última fecha de la fase de grupos del torneo Apertura. El juez chuquisaqueño tuvo una actuación decente que no repercutió en el resultado.
En la primera mitad, Rodríguez detuvo el partido en reiteradas oportunidades, pero a la hora de tomar decisiones estuvo acertado. Mostró tarjetas amarillas cuando tuvo que hacerlo y no se dejó llevar por la presión del público.
Sin embargo, por momentos fue muy permisivo con la perdida de tiempo del equipo visitante, sobre todo con Pipo Giménez, un especialista en estas artimañas.
En el complemento, también acertó, pero volvió a cortar el juego en múltiples ocasiones. No hubieron jugadas polémicas, el VAR no tuvo que intervenir y eso le facilitó la tarea.
La actuación de Rodríguez, hizo olvidar por momentos el desastroso arbitraje de Guery Vargas en el partido de Blooming y Nacional Potosí. En este encuentro, el experimentado juez orureño tuvo errores determinantes que incidieron en el marcador.