Kerlikowske, preocupado por la coca. El Gobierno de EEUU sugiere reducir los cocales para evitar una mayor producción de cocaína.
La Fuerza de Tarea Conjunta erradicó este año 3.900 hectáreas de coca (ABI)
La Prensa
Gil Kerlikowske, “zar” antidrogas de Estados Unidos, aseguró ayer que su Gobierno busca trabajar de forma conjunta sobre el tema con Hugo Chávez y Evo Morales, presidentes de Venezuela y Bolivia, a pesar de las diferencias ideológicas que los separan de Barack Obama.
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Kerlikowske hizo estas afirmaciones ayer durante la jornada inaugural de la XXIII Conferencia Anual de la Corporación Andina de Fomento (CAF), que concluirá hoy en Washington DC.
Dijo que “el mantra de Morales es decir sí a la coca y no a la cocaína, nos gustaría trabajar con él para reducir la cantidad de cocaína en Bolivia, aunque no estamos de acuerdo con que permitir la producción de más coca sea compatible con ese objetivo”.
Según Naciones Unidas, cuando Evo Morales asumió la Presidencia del Estado, Bolivia tenía 25.400 hectáreas plantadas con hoja de coca, y actualmente hay 30.500, aunque el Gobierno de Estados Unidos sostuvo que hay 32.000, razón por la que suspendió los beneficios arancelarios andinos para el país.
El funcionario estadounidense sostuvo que a mayor cultivo de hoja de coca, habrá mayor producción de cocaína.
“Nos gustaría escuchar de Chávez dónde podemos colaborar”, aunque las mayores dificultades están en Bolivia, por la expulsión de la DEA (Agencia Antidrogas de Estados Unidos, por sus siglas en inglés) y del embajador Philip Goldberg, llevadas a cabo el año pasado.
En su opinión, ambos hechos “han complicado las cosas, pero si Evo Morales está dispuesto a cooperar, nosotros también”.
El incremento de los cultivos en Bolivia derivó en el crecimiento del potencial productivo del alcaloide de 104 a 113 toneladas entre 2008 y 2009.
Pese a ello, Washington exteriorizó su disposición a buscar “áreas de potencial cooperación” para combatir la producción y el tráfico ilegal de drogas, en coordinación con Bolivia y Venezuela, pues el Gobierno de Barack Obama desea asumir su “responsabilidad” en la materia.
“La política antinarcóticos estadounidense, basada principalmente en el control del suministro de drogas, ya no es una política sostenible”.
Evo Morales anunció el 18 de noviembre del año pasado que la lucha contra las drogas se nacionalizaría después de la expulsión de la DEA.
En aquella ocasión, Morales sostuvo que “aunque es responsabilidad de todos los países, especialmente de Estados Unidos y Europa, participar en una lucha efectiva contra el narcotráfico, queremos y tenemos que nacionalizar la lucha contra el narcotráfico”.
Kerlikowske no especificó cuáles serán las medidas que su país está en condiciones de aplicar para llevar adelante la cooperación, pues dijo que esa información solamente puede ser proporcionada por el Departamento de Estado.
Sin embargo, adelantó que “es especialmente importante compartir inteligencia que mejore la confianza para romper el ciclo del narcotráfico”.