Animales desesperados huyen en busca de un refugio seguro, ante el devastador avance de las llamas.
Fuente: Red Uno
En los últimos días, la Chiquitanía ha sido escenario de una devastadora serie de incendios forestales que han dejado un saldo catastrófico en la región. La flora y fauna local están sufriendo las consecuencias de este desastre natural, y la situación se agrava con cada nuevo informe que llega desde el terreno.
El periodista Romer Castedo, en su cobertura de la emergencia en el municipio de Urubichá, ha presenciado de cerca el impacto de los incendios en la vida silvestre. Castedo informó sobre un quirquincho, conocido localmente como tatú, al que rescató mientras huía de las llamas. El animal se encontraba deshidratado y en condiciones críticas, un reflejo de la difícil situación que enfrentan muchos otros seres vivos en la zona.
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El bombero encargado del campamento donde se brinda atención a los animales, informó que la mayoría de estos presentan signos de deshidratación severa y quemaduras en sus patas. “La mayoría de los animales que llegan a nuestro campamento están en estado crítico. La falta de agua y alimentos, sumada a las quemaduras, pone en riesgo su vida”, explicó.
A lo largo de la carretera, la escena es igualmente alarmante. Animales desesperados huyen en busca de un refugio seguro, tratando de escapar del devastador avance de las llamas. En el parque Ambue Ari, uno de los principales refugios de vida silvestre en la región, la situación es aún más sombría. La encargada del refugio informó que una gran cantidad de animales han sido afectados por los incendios, incluidos jaguares, tortugas, osos perezosos y águilas.
“Muchos de los animales han muerto calcinados o han estado durante días o semanas sin acceso a agua y alimentos. La situación es extremadamente grave”, comentó la encargada del parque.
Las autoridades y bomberos están trabajando arduamente para mitigar el daño y brindar asistencia a los animales afectados. Sin embargo, la magnitud de los incendios y su impacto en la vida silvestre de la Chiquitanía subraya la necesidad urgente de medidas más efectivas para prevenir futuros desastres y proteger el frágil equilibrio ecológico de la región.