Para la estabilización del lugar, los obreros abrieron un canal provisional de cuatro metros para que fluya el lodo que se quedó estancado en el lugar, además construyeron gaviones para la desviación del agua.
Tras tres semanas de la mazamorra que sumergió varias casas en la zona de Bajo Llojeta, este viernes algunas familias lograron ingresar a sus viviendas para realizar los trabajos de drenaje. La Alcaldía estabilizó el lugar con maquinaria pesada.
“La maquinaria ha trabajado fuerte y el agua ha bajado dos ladrillos y hoy ya he podido ingresar”, contó a UNITEL una de las vecinas afectadas. “Me puse fuerte, con mi mano saque el agua, derribé lo que tapaba”, agregó.
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La mazamorra ocurrió el pasado 23 de noviembre cuando impactó a las viviendas de Bajo Llojeta, unas 40 casas quedaron bajo el barro y una niña de cinco quedó enterrada, días después encontraron su cuerpo sin vida.
Para la estabilización del lugar, los obreros abrieron un canal provisional de cuatro metros para que fluya el lodo que se quedó estancado en el lugar, además construyeron gaviones para la desviación del agua.
“Nos ha ayudado muchos el tiempo seco, a sacar mucho barro, bajar los niveles de agua. Hemos pedido de que la empresa también sea participe de este plan de contingencia porque la afectación de las viviendas no es producto de la naturaleza”, dijo el alcalde Iván Arias.
El miércoles, la Sala Constitucional Primera falló a favor de la Alcaldía de La Paz y determinó que la empresa inmobiliaria que administra un cementerio (y que presuntamente realizó movimiento de tierra) amplíe su plan de contingencia a las zonas afectadas por la mazamorra en Bajo Llojeta.
El alcalde adelantó que las viviendas no son habitables por el momento y más adelante se tendrá la certeza si los vecinos pueden retornar a sus hogares.