El 22 de enero es un gran día para recordar en la gloriosa historia cruceña porque en un día como hoy en 1622, hace ya 403 años, para bien o para mal, se fusionaron las dos ciudades de la llanura, Santa Cruz de la Sierra (fundada en 1561) y San Lorenzo el Real de la Frontera (fundada en 1590).
Fuente: Ideas Textuales.com
El 1º de noviembre de 1604 Santa Cruz de la Sierra en el Suto fue oficialmente abandonada por los últimos cruceños, al mando del fiscal especial D. Francisco de Alfaro, dando estricto cumplimiento a una orden virreinal y de Charcas para dejar la ciudad e incorporarla a la flamante ciudad de San Lorenzo de la Frontera fundada en 1590.
Pero los cruceños que no estaban nada conformes con esa absorción disfrazada de fusión, no se incorporaron directamente a la nueva creación andina sino que más bien se asentaron entre 1605 y 1621 a unas tres leguas, en la zona comprendida entre Cotoca y Don Lorenzo, donde de inmediato comenzaron a producir como ellos sabían, para abastecer los insaciables mercados de Potosí y el altiplano.
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Esta actitud contestataria de los cruceños no fue para nada del agrado de los “patrones andinos” que constantemente presionaban para que Santa Cruz de la Sierra se traslade para incorporarse a San Lorenzo el Real de la Frontera, que ya se había mudado a la punta de San Bartolomé en 1595 y que es donde se encuentra actualmente.
Sin embargo, a partir de 1621 la presión se tornó insoportable porque el propio gobernador Nuño de la Cueva lo tomó como premisa principal el realizar la tan esperada fusión.
De este modo y bajo presión, el 5 de noviembre de 1621 el Cabildo de San Lorenzo aprobó la fusión inmediata de las dos ciudades, pero el Cabildo cruceño que casualmente estaba presidido nada menos que por el Cap. D. Francisco Osorio de Chaves, hijo del fundador de Santa Cruz de la Sierra, reunido tres días después, el 8 de noviembre, lo rechazó terminantemente.
Como de inmediato vino la amenaza de no permitir que las mulas lleven a Potosí la producción cruceña que era vital para el sostenimiento de su población, así, de este modo, y bajo presión al día siguiente 9 de noviembre, se reunieron las principales autoridades y vecinos de ambas ciudades y acordaron su fusión, que finalmente llegó a materializarse con la solemne firma de un convenio firmado el 22 de enero de 1622, es decir hace ya 403 años
Por este convenio Santa Cruz de la Sierra virtualmente desapareció del mapa hasta 1784, en el que su nombre se impuso total y definitivamente y por encima de los mandatos reales sobre el nombre de San Lorenzo, del que sólo quedaría el recuerdo en el nombre de nuestra catedral.
Lamentablemente esta gran fecha de recordación histórica, ahora y por mandato de una pésima y sectaria Constitución, recuerda con feriado* la funesta celebración de un estado fallido, racista, excluyente y corrupto cuya efímera existencia tiene los meses contados.
German Carrasco Ardaya, historiador miembro de la Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz.
*Nota de edición: En Bolivia el 22 de enero de 2006 asumió la presidencia Evo Morales y en su gobierno se instituyó como día feriado nacional de «fundación» del Estado Plurinacional.
Fuente: Ideas Textuales.com